sábado, 30 de noviembre de 2013

Día 220 - Ideas y superioridad para justificar infidelidad

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Dimensión de Miedo:
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Ok, ahora veamos al segundo punto por el cual besaría a la mujer:
2-Voy a sentirme superior porque sé besar/voy a manifestar/expresar que sé besar.

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo desear besar a una chica, al saber que una chica gusta de mí o quiere besarse conmigo, ya que ese sería el pie para poder generar mi experiencia de superioridad por la idea de que soy un buen besador, en donde recuerdo cuando besé por primera vez y me vi siendo un buen besador en ese momento en el que cambié mi idea de no saber besar/ser inferior a ser superior/saber besar.

En el momento y cuando me vea deseando besar a una chica, al saber que una chica gusta de mí o quiere besarse conmigo, por la idea de que soy un buen besador para generar mi experiencia de superioridad – me detengo y respiro. Me doy cuenta que la idea de ser un buen besador la uso como combustible para desear besar a una chica y desde allí generar mi experiencia de superioridad por cómo yo beso.

Me comprometo a mí mismo a detener la idea de que soy un buen besador a través de respirar y así detener el deseo de besar a una chica y la experiencia de superioridad como resultado de la idea de ser un buen besador, estabilizándome respirando, y así mantenerme firme a mi decisión de permanecer fiel a mi relación de pareja/no ir tras mujeres por una experiencia, idea y/o percepción.

3-Conocer cómo besan las distintas mujeres.

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo usar la excusa de conocer cómo besan las distintas mujeres para validar mi infidelidad y el ir besando mujeres para generar mi experiencia de superioridad, en donde recuerdo la primera vez que di un beso largo a una mujer, me juzgué como un buen besador, generando esta experiencia de superioridad y es también después de ese evento cuando dije que quiero conocer cómo besan las distintas mujeres.

En el momento y cuando me vea usando la excusa de conocer cómo besan las distintas mujeres para validar mi infidelidad y el ir besando mujeres para generar mi experiencia de superioridad – me detengo y respiro. Me doy cuenta que ninguna excusa, razón o justificación es válida para ir en contra de tomar responsabilidad de mí mismo, ya que al no hacerlo crearía consecuencias como la de generar éste hilo/conexión/excusa para infidelidad y así tener una experiencia energética, lo cual es totalmente inaceptable, así que, momento de tomar responsabilidad de mis decisiones/cómo caminaré mis relaciones y no tomar decisiones con el punto de partida de reacciones de sentimientos y emociones.

Me comprometo a mí mismo a detener la excusa de querer conocer cómo besan las distintas mujeres para validar mi infidelidad y el ir besando mujeres para generar mi experiencia de superioridad a través del respiro, dándome cuenta que no hay razón, excusa o justificación por la cual no tomar responsabilidad de mí mismo y que todo punto de partida de reacción/experiencia energética/deshonestidad/no tomar responsabilidad de mí mismo es inaceptable y tengo que darme dirección inmediatamente.

En el próximo post caminaré los patrones de abdicar mi responsabilidad a mis relaciones al decidir hacer algo siguiendo con la historia/memoria/evento.

Muchas gracias.

viernes, 29 de noviembre de 2013

Día 219 - Perdón a uno mismo sobre la construcción de especialidad

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Dimensión de Miedo:

-Miedo a la infidelidad:


Contexto a partir del día 217.

Perdón a uno mismo en relación a mi construcción de especialidad/ser único/diferente:

Definamos especialidad/ser único/diferente: El punto de especialidad prácticamente es que las consciencias/la atención de los demás esté en mí por algo que soy/tengo/digo/hago, y en ello un reconocimiento y consideración del otro individuo por eso que yo hago/digo/tengo/soy y al tener ese ‘mayor respeto’ porque me da una percepción de ser más que otros individuos, generar una experiencia de ser único/especial/diferente.

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo desear ser especial/único/diferente/que las consciencias/atención de los demás esté en mí y para ello, crear razones y justificaciones que lo hagan válido, es decir por algo que soy/tengo/digo/hago para tener el reconocimiento y consideración de los demás por eso que soy/tengo/digo/hago y así, sentirme que soy especial/único/diferente al percibir que soy más por éste reconocimiento, en donde recuerdo cuando me gustaba jugar a los juegos, y le pedía a mi hermano que me vea jugar para tener el reconocimiento de lo que vi por mí mismo, de que soy bueno en los juegos, lol.

En el momento y cuando me vea deseando ser especial/único/diferente/que las consciencias/atención de los demás esté en mí y para ello, crear razones y justificaciones que lo hagan válido – me detengo y respiro. Me doy cuenta que éste deseo por ser especial es creación mental/experiencia mental y que de hecho, creerme especial/único/diferente por algo que puedo ser/hacer/tener/decir en realidad es un punto de crear separación entre los demás y yo, cuando en realidad todos deberíamos ser considerados como iguales en el contexto de ser seres con vida, que algo que puedo ser/hacer/tener/decir no cambia eso, por ende, estoy creando una desconsideración y no reconozco a otros individuos como vida al enfocarme en que sea visto, observado, considerado y reconocido como más que otros, sólo para tener esa experiencia de ser especial/único/diferente, es decir, todo eso es mental, no debería considerarlo para mi aplicación, ya que entonces estaría manipulando a los demás para sentirme superior y único/diferente/especial, lo cual es totalmente no tener respeto por la vida y abusarla.

Me comprometo a mí mismo a detener el deseo de ser especial/único/diferente/que las consciencias/atención de los demás esté en mí a través de respirar, disipando la reacción y estabilizándome con el respiro, dándome cuenta que querer sentirme/percibirme superior, especial, único o diferente es una creación de mí mismo mental que no debería ser dado la luz del día, por lo que detengo todo movimiento y búsqueda por el reconocimiento y consideración de lo que soy/hago/tengo/digo bajo éste punto de partida, ya que veo la manipulación, falta de respeto y abuso hacia la vida, y más bien me mantengo dentro de y como la consideración de que todos los individuos somos vida, no soy superior o más que otro por algo que hago/digo/soy/tengo sino que eso que hago/digo/soy/tengo crean un resultado específico y es simplemente eso, y así ningún tipo de experiencia como de sentirme o percibirme superior, especial, único y diferente debería ser considerado por el hecho de ser mental.

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo desear tener algo que los demás no tengan como un punto de ‘soy especial/único/diferente porque soy/tengo/hago/digo esto’, para que pueda tener esa observación/atención de los demás y reconocimiento de ser mejor/más para generar esta experiencia de ser considerado y reconocido, en donde recuerdo en diferentes etapas de mi vida donde quise tener una novia que sea vista por otros hombres, que les guste a los otros hombres, quise tener ciertas cosas materiales, verme de cierta manera, y así, todo en el nombre de querer ser reconocido y considerado por los demás.

En el momento y cuando me vea deseando tener algo que los demás no tengan como un punto de ‘soy especial/único/diferente porque soy/tengo/hago/digo esto’ – me detengo y respiro. Me doy cuenta que realmente al ir tras ésta búsqueda de reconocimiento y consideración de los demás estoy haciéndolo para generar una experiencia de ser especial/único/diferente, ser considerado y reconocido, por ende, es para alimentar la idea de mí mismo de ser especial, único y diferente, lo cual es una manera de perder contacto con la realidad, abuso y desconsideración.

Me comprometo a mí mismo a detener el deseo de tener algo que los demás no tengan como un punto de ‘soy especial/único/diferente porque soy/tengo/hago/digo esto’ a través de respirar, disipando y estabilizándome con el respiro, reconociendo que estoy queriendo crear una experiencia mental para mí mismo, y en ello abuso y desconsidero el punto de igualdad como seres vivos iguales no importa qué diferencia puede haber en cómo sea, lo que haga, lo que tengo o lo que diga, así que definitivamente aquí el punto es detener mis percepciones e ideas de especialidad/ser único/diferente para enfocarme en vivir en integridad, respeto y honor a mí mismo y la vida.

Me comprometo a mí mismo a volverme consciente de los momentos en los que busco/deseo/quiero experimentar algo que he creado o construido en mi mente y uso a los demás para poder experimentarlo/sentirlo.

Me comprometo a mí mismo a reconocerme y considerarme a mí mismo y lo que decida y elija vivir como yo mismo a manera de construir respeto a mí mismo/consideración y reconocimiento.

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo enfocar mi consciencia en los demás para ver si reconocen o se dan cuenta de algo que hago/soy/tengo/digo, cuando estoy siendo/haciendo/teniendo/diciendo algo/mostrándole algo a un individuo en nuestra interacción, para asegurarme que ellos me observen/me atiendan/reconozcan eso que yo estoy definiendo en ese momento como especial, único o diferente a los demás, con el fin de poder sentirme especial, único, diferente o superior, y si el individuo no reacciona o reconoce eso que estoy mostrándole, no obtengo el resultado que quiero, generar una experiencia de enojo por no tener el resultado que quería/control del resultado.

En el momento y cuando me vea enfocando mi consciencia en los demás para ver si reconocen o se dan cuenta de algo que hago/soy/tengo/digo, cuando estoy siendo/haciendo/diciendo/tengo algo/mostrándole algo a un individuo en nuestra interacción – me detengo y respiro. Me doy cuenta que me estoy separando de mi cuerpo físico al colocar mi consciencia/atención fuera de mí mismo, lo cual significa desconsideración, descuidado y no darle atención a mi cuerpo físico humano por un momento, que lo estoy haciendo sólo para obtener una experiencia energética, una percepción, un resultado que pueda generarme la experiencia que quiero y al hacer esto, más de mi físico me separo y más de la realidad me separo, al punto donde mi consciencia está más enfocada en pensamientos y energía, que en mi físico y aquí en la realidad física real.

Me comprometo a mí mismo a detener el enfocar mi consciencia en los demás para ver si reconocen o se dan cuenta de algo que hago/soy/tengo/digo, trayéndome al respiro y mi consciencia/atención a mi físico en primer lugar y entonces al ir mirando lo que está aquí/los otros individuos, asegurarme que respiro, que mi cuerpo físico tiene atención para estar consciente de qué experimento, siento y que esté estable, para así en vez de buscar consideración y reconocimiento de algo, considero y reconozco mi experiencia física, mi cuerpo físico humano.

Me comprometo a mí mismo a detener la idea de ser especial, único, diferente y/o superior en relación a lo que hago/soy/tengo/digo, y detener la percepción y experiencia creada debido a la misma idea, dándome cuenta que estoy metiéndome en una burbuja de energía de la mente, y no en realidad aquí con mi cuerpo físico humano, respirando, estable, sintiéndolo.

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo generar una experiencia de superioridad, ser especial, único y/o diferente a los demás, al definir qué es único, especial o diferente en lo que soy/hago/digo/tengo y las personas lo reconocen o consideran.

En el momento y cuando me vea generando una experiencia de superioridad, ser especial, único y/o diferente a los demás, al definir qué es único, especial o diferente en lo que soy/hago/digo/tengo y las personas lo reconocen o consideran – me detengo y respiro. Me doy cuenta que ese reconocimiento implica eso, que el individuo observó lo que hice y le llamó la atención o vio algo en ello que puede compartir o que puede considerar, y es simplemente eso, es decir, no me hace superior, único, especial o diferente, sino más bien que puede producir ciertos resultados lo que soy/hago/digo/tengo, por ende, la experiencia energética, la percepción es mi creación, el punto de separación con la realidad física.

Me comprometo a mí mismo a detener la experiencia de superioridad, ser especial, único y/o diferente a los demás respirando, detener toda idea de ser único, especial o diferente de acuerdo a lo que soy/hago/digo/tengo, ya que me doy cuenta que simplemente producen resultados aquellos puntos, y cuando el individuo reconoce algo de mí, entiendo que ha observado y le ha llamado la atención algo y puede compartirme por qué y qué ve de eso, y eso es todo.

Es interesante que toda búsqueda/deseo/idea/percepción es separación de uno mismo, enfocar la consciencia en algo allá afuera y desconsiderar completamente lo que sucede en nuestro cuerpo físico, lo que realmente experimentamos y sentimos en nuestro cuerpo físico humano mismo – es por eso que cualquier búsqueda por fuera de nosotros/colocar nuestra atención allá afuera es de hecho no tener cuidado, respeto y atención por nuestros mismísimos físicos, la parte que nosotros podemos ser consciente de qué está pasando dentro y que por ende, totalmente responsables.

Esto crea la polaridad opuesta obviamente que es cuando hago algo que no es único, especial o diferente, es decir, que yo mismo he juzgado como más de lo mismo, típico o, en esencia negativo, generar esa misma experiencia, por la carga energética negativa que le he asociado a los juicios y por ende, a aquello que tengo/hago/digo/soy.

Y por esto: me comprometo a mí mismo a investigar/hacer introspección/escribir, perdonarme a mí mismo y comprometerme a mí mismo a detener todas las definiciones, aspectos, acciones, palabras, pensamientos, conceptos, ideas producidas para crearme una experiencia energética, una percepción de mí mismo debido a la aceptación y permiso de desear consideración y reconocimiento de los demás por cosas que realmente no soy, como por ejemplo superior, único, especial y en vez de estar tras la búsqueda o querer sentirme o experimentar o ser algo que no soy como definiciones, creencias, ideas, juicios y percepciones de mí mismo – considerar y reconocer mi cuerpo físico humano, cómo me siento, cómo me experimento, qué requiero, qué no requiero, qué estoy dispuesto a hacer y por diseño de mi físico o por mi condición física es aceptable, qué puedo expresar, qué soy, etc. a manera de construir y crear respeto a mí mismo y honrarme a mí mismo al ser coherente mis palabras y acciones con ésta consideración y reconocimiento de mi físico, mi experiencia, lo que siento en términos de cómo apoyarme y asistirme a atender y cuidar mi cuerpo físico humano.

Continuaré caminando las otras ideas y deseos por las cuales justifiqué serle infiel a mi novia.

Muchas Gracias.

jueves, 28 de noviembre de 2013

Día 218 - Perdón a uno mismo sobre la manipulación de memorias

Éste post es continuación de:

Dimensión de Miedo:

-Miedo a la infidelidad:


Para contexto de ésta aplicación ver el blog anterior.

Ok, comencemos entonces con la aplicación de perdón a uno mismo en relación a las memorias y manipulación:

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo definirme a mí mismo, quién soy, qué soy y cómo soy de acuerdo a memorias para reconocerme a mí mismo como el quién soy, qué soy y cómo soy, en donde recuerdo cuando quería saber en qué momento comencé a ser consciente de mí mismo/recordar/pensar y comencé a tomar memorias para crear una historia que tenga sentido para mí para definir quién soy, qué soy y cómo soy, con la intención de encajar en una determinada definición.

En el momento y cuando me vea definiéndome a mí mismo, quién soy, qué soy y cómo soy de acuerdo a memorias para reconocerme a mí mismo como el quién soy, qué soy y cómo soy – me detengo y respiro. Me doy cuenta que quién soy, qué soy y cómo soy puedo determinarlo y definirlo por mí mismo en cada momento de respiro a través de los distintos puntos que tomo en consideración para moverme/expresarme a mí mismo.
Me doy cuenta que la memoria puedo utilizarla para reconocer el quién, qué y cómo fui en un momento específico, identificando los procesos y movimientos internos y externos que tuve que me llevaron a ello, entonces puedo usar la memoria para definir ese momento y referenciar para mi aplicación en el momento de aquí.
Me doy cuenta que al usar la memoria para definir quién, qué y cómo soy, eventualmente creo la integración de la memoria en mi físico al punto en el que se vuelve completamente automático, es decir, no hay consciencia de la memoria en sí que tomo para experimentarme a mí mismo ya que lo integré a nivel físico, y dentro de esto, me doy cuenta que puedo utilizar las memorias para apoyarme y asistirme en mi proceso de darme nacimiento a mí mismo como la vida al corregir y cambiarme a mí mismo, aprendiendo del pasado/mis memorias y quedándome con qué es mejor para vivir la integración de principios de vida/palabras que voy a vivir como qué es mejor para todos.

Me comprometo a mí mismo a, en el momento y cuando me vea definiéndome a mí mismo, quién soy, qué soy y cómo soy de acuerdo a memorias, detengo mi participación a través de respirar, y en el momento evalúo la memoria en términos de quién, qué y cómo fui para determinar qué procesos mentales ocurrieron que definitivamente esta vez detendré mi participación y qué consideraciones tuve o que ahora puedo tener que puedo tomar en cuenta para el momento de aquí, alineándome a la realización de mí mismo como vida.

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo manipular mis memorias dentro del punto de partida de querer definirme a mí mismo de cierta manera/tener una determinada definición de mí mismo, tomando las memorias para crear ideas, percepciones y creencias de mí mismo de quién soy, cómo soy y qué soy como definición de mí mismo, en donde recuerdo cuando comencé a tomar las memorias que tenía en mi infancia para definir mi línea de tiempo de qué es lo que pasó primero y qué pasó después y así sucesivamente para definir en qué momento comencé a ser consciente de mí mismo, con la intención de querer definirme a mí mismo como especial, único y diferente.

En el momento y cuando me vea manipulando mis memorias dentro del punto de partida de querer definirme a mí mismo de cierta manera/tener una determinada definición de mí mismo, tomando las memorias para crear ideas, percepciones y creencias de mí mismo de quién soy, cómo soy y qué soy como definición de mí mismo – me detengo y respiro. Me doy cuenta que la manipulación de mis memorias implica que no puedo confiar en mis memorias, en términos de definirme a mí mismo de acuerdo a una memoria, o definir qué es mejor en éste momento de acuerdo a una memoria y cosas así, ya que de hecho lo que no estoy considerando es qué es lo que realmente está aquí, y que de hecho, yo decido quién, qué y cómo soy aquí, por ende, la memoria no lo definirá, sino mi movimiento volitivo de mí mismo.
Me doy cuenta que al definirme a mí mismo de cierta manera/tener una determinada definición de mí mismo a través de memorias, estoy deliberadamente aceptando y permitiendo en mí mismo ser y convertirme en algo que he aceptado y permitido en un momento determinado, el qué, quién y cómo soy, al punto de integrarlo en mí mismo como quién, qué y cómo soy, es decir, al punto de no ser consciente/volverse inconsciente lo que estoy aceptando y permitiendo, lo cual esto muestra mi completa deliberación al definirme a mí mismo de cierta manera por una memoria y la automatización de procesos mentales con ello.
Me doy cuenta que al definirme a mí mismo por memorias el qué, quién y cómo soy sólo por aceptar y permitirme permanecer y existir en y como esa memoria, no estoy dándome realmente la oportunidad de decidir aquí quién, qué y cómo soy, donde yo mismo tomo mi principio directivo y voy formando, construyendo y creando mi punto de partida, qué hago, cómo lo hago, cómo soy, qué soy, quién soy, etc. es decir, realmente ver aquí, elegir y decidir con qué quedarme y qué dejar de mantener, quedarme con y existir en y como, para integrar realmente aquello que es mejor para mí y toda la vida.
Me doy cuenta que yo decido qué, quién y cómo soy al construir un vocabulario y las palabras que voy a vivir, las consideraciones y referencias que debo tener para la aplicación de las mismas, para definir realmente lo que voy a vivir, lo que voy a ser y crear como yo mismo como la palabra viva al poner en práctica los principios de vida.
Me doy cuenta que en las memorias hay aceptaciones y permisos de mí mismo que no he cuestionado, que no cuestioné mi punto de partida, mis experiencias, cómo las generé y entonces, al definirme en ellas, al vivir un evento donde emerge la memoria, surge mis aceptaciones y permisos con ello, en donde de hecho en ese momento tengo la oportunidad de cambiarme/corregirme a mí mismo, mis aceptaciones y permisos a través de detener aquello que he aceptado y permitido y aplicar prácticamente la corrección/cambio, por ende, me doy cuenta que cuando tengo que enfrentar una situación ‘de nuevo’, es cuando tengo que enfrentar mi memoria/lo que acepté y permití como mi punto de partida, los procesos mentales, las creencias, ideas, etc. en esencia mis aceptaciones y permisos en donde tengo la elección de cambiarme/corregirme y así eso se convierte en una referencia/memoria de cómo vivir estable, aquí, con mi cuerpo físico/el cambio/corrección que apliqué para así tener la posibilidad de integrar esa aplicación, y hasta ir viendo qué más considerar para ir integrando como yo mismo.

Me comprometo a mí mismo a detener la manipulación de memorias y el definirme a mí mismo a través de memorias, y en vez, ver mis memorias como eso que he aceptado y permitido en mí mismo en un momento y entonces ver qué es aceptable y qué no lo es en términos de qué es real y está alineado a la realidad física, y qué no es real y está alineado a la mente/creaciones mentales, para caminar un proceso de perdón a uno mismo y aplicación correctiva donde me comprometo a mí mismo a corregirme y cambiarme a mí mismo para vivir de verdad en lo que es real, en alineación con la realidad física, dentro de la consideración de qué es mejor para toda la vida, para vivir en honor, respeto e integridad.

Me comprometo a mí mismo a apoyarme y asistirme a mí mismo a vivir mis palabras al punto de integrar físicamente aquello que decido vivir como yo mismo.

Me comprometo a mí mismo a ser constante y consistente en mi aplicación de mis compromisos ya que veo, entiendo y me doy cuenta de que tengo que aplicar mis compromisos prácticamente cada vez que me vea en el punto que debo darme dirección/corregirme/cambiar, ya que realmente tengo que detenerme, realmente tengo que darme dirección, es decir, yo definiré el resultado de acuerdo a cómo me mueva en ese momento, lo tengo claro.


En el próximo blog caminaré el perdón a uno mismo sobre la construcción de especialidad/ser único/diferente.

Muchas gracias.