jueves, 26 de enero de 2017

Estudio y Rigidez - Día 317

Hoy me levanté y me sentía sin ganas de hacer muchas cosas, solamente enfocarme en estudiar. Pensaba que si no le dedicaba muchas horas al estudio, me iba a ir mal, no podría aprender lo suficiente y cosas así. Pienso que necesito estudiar días enteros para que me vaya bien. Tuve conflictos esta mañana con respecto a qué cosas hacer, porque, como dije, pienso que el estudio me va a llevar mucho tiempo y si hago otras cosas, no voy a poder estudiar lo suficiente, así que mientras estudiaba pensaba que tenía que ir al super para comprar algunas cosas, y en mi mente me proyectaba yendo al super cansado, pesado – como si ir a al supermercado fuese una carga.


Perdón a Uno Mismo 


Me perdono a mí mismo por aceptarme y permitirme a mí mismo tornarme rígido en las cosas que voy a hacer hoy al pensar que hoy tengo que enfocarme en estudiar y estar todo el día estudiando.

Me perdono a mí mismo por aceptarme y permitirme a mí mismo cerrarme en mi mente a pensar y considerar solamente el estudio para hoy, cerrando la puerta de oportunidad a otras cosas y actividades a hacer, al igual que necesidades y requerimientos básicos diarios.

Me perdono a mí mismo por aceptarme y permitirme a mí mismo tornarme rígido en mi relación conmigo mismo al solamente enfocar mi día en estudiar.

Me perdono a mí mismo por aceptarme y permitirme a mí mismo motivarme a través de miedo y estrés, durante el día, a estudiar solamente.

Me perdono a mí mismo por aceptarme y permitirme a mí mismo temer que me vaya mal en los exámenes y debido a ello crear una rigidez en mi organización diaria donde no considero otras tareas o actividades a realizar por pensar que ‘perderé el tiempo en ello’.

Me perdono a mí mismo por aceptarme y permitirme a mí mismo juzgar como ‘pérdida de tiempo’ todo aquello que no tenga que ver con mi deseo a que me vaya bien en los exámenes y que no tenga que ver con el estudio, sin darme cuenta que aunque no tenga que ver con el estudio, no sea un tiempo que esté invirtiendo en ello, lo estoy invirtiendo en otros aspectos y dimensiones de mi vida, como el cuidado personal como alimentación, higiene, relaciones, etc.

Me perdono a mí mismo por aceptarme y permitirme a mí mismo, al considerar que tengo que ir al supermercado, proyectarme yendo al supermercado y experimentándome cansado y pesado, como si fuese una actividad muy pesada y dificultosa a realizar.

Me perdono a mí mismo por aceptarme y permitirme a mí mismo, al considerar cosas para hacer durante el día, crear postergación hacia tales actividades por pensar que ‘es una pérdida de tiempo’ con respecto a estudiar, en lugar de darme cuenta que si estoy creando postergación, de hecho son actividades que son requeridas o necesarias para mí, para algunos aspectos y dimensiones de mi vida.

Me perdono a mí mismo por aceptarme y permitirme a mí mismo proyectar en cosas que juzgo como una ‘pérdida de tiempo’ las experiencias de pesadez, dificultad, carga en ellas para de hecho no hacerlas.

Me perdono a mí mismo por aceptarme y permitirme a mí mismo reprimir e ignorar pensamientos que emergen durante el día / estudio relacionado a otras tareas o actividades que requiero hacer durante el día para solamente estar enfocado en el estudio.

En el momento y cuando me vea entrando en una rigidez / en no querer considerar nada más que el estudio / enfocándome solamente en estudiar, me detengo y respiro. Me doy cuenta que estoy cerrando las puertas a otros aspectos y dimensiones de mi vida que requieren atención y cuidado también, por lo tanto estoy tornándome unidimensional debido a miedo y presión de que me vaya mal en los exámenes. Me comprometo a mí mismo a liberar el miedo y presión a través del perdón y realmente evaluar mi día y las cosas que tengo que hacer si son prácticas, posibles y en qué momento hacerlas, sin dejar de lado ningún aspecto o dimensión de mi propia vida.

En el momento y cuando me vea juzgando alguna cosa que tengo que hacer o que estoy considerando, como “es una pérdida de tiempo”, “voy a perder el tiempo”, me detengo y respiro. Me doy cuenta que es una ‘pérdida de tiempo’ en el aspecto de ‘enfocarme en solamente estudiar’, pero esto está mostrándome que estoy tornándome muy rígido con respecto al estudio y que igualmente no estoy abriéndome a todas las posibilidades y potenciales durante el día para satisfacer otros aspectos y dimensiones de mi vida. Me comprometo a mí mismo a abrirme a otros potenciales que emergen durante el día para hacer otras cosas y así satisfacer otras dimensiones y aspectos de mi vida.

Me comprometo a mí mismo a no negar otros aspectos y dimensiones de mi vida que requieren también el cuidado y atención de mí mismo.


En el momento y cuando me vea proyectando en alguna actividad que considero o necesito hacer, las experiencias de pesadez, carga, dificultad – me detengo y respiro. Me doy cuenta que estoy de hecho negándome y cerrándome a los potenciales durante el día de hacer y satisfacer otros aspectos y dimensiones de mi vida que también tengo que estar cuidando y atendiendo. Me comprometo a mí mismo a liberar estar experiencias que he proyectado a través del perdón y tornarme más abierto, dispuesto y aceptar estas otras actividades, aspectos y dimensiones de mi vida que requiero atender y cuidar.

miércoles, 4 de enero de 2017

Movimiento y Tiempo - Día 316

Estuve escuchando una grabación publicada hoy en EQAFE, en la que Sunette habla acerca del deseo o querencia de querer avanzar más rápido en el proceso de parar pensamientos, emociones, sentimientos, imaginaciones, adicciones, conversaciones internas, entre otros componentes y manifestaciones de la mente de uno mismo, y el querer cambiar y todo hacerlo rápido, o la pregunta de “¿estaré haciendo bien mi proceso? ¿Estaré en el camino correcto?” Entre otras experiencias y pensamientos que pueden emerger en relación al proceso, ligándolo al tiempo y el querer el cambio suceder en uno mismo ya, ahora mismo.

Algunos años había escuchado una grabación de Anu acerca del mismo punto, de querer ir más rápido en el proceso o pensar que nos movemos muy lentos en el proceso, pero no lo llevé al punto de hacer introspección y ver realmente cómo de hecho vivo esa experiencia, cómo de hecho existe tal punto dentro de mí en todas sus dimensiones.

Hay algunas experiencias que había tenido que se relacionan de alguna manera a este punto:

  • Deseaba y esperaba en mi proceso poder vivir un día completamente activo, haciendo distintas actividades diarias, como estudiar, grabar, limpieza, escritura, gimnasio, caminar, cocinar, alguna actividad recreativa, etc. Muchas veces me he motivado a empujarme diariamente a tener horarios, dormir a tal hora, despertar a tal otra, de tal a tal hora ponerme a hacer cierta actividad y así, lo cual de hecho creé una estructura rígida e inflexible, y me di cuenta que tiendo a tornarme rígido e inflexible cuando creo una estructura y una organización para mi día. Es bastante interesante porque no me daba cuenta cuando lo vivía, y lo pude entender con mi novia cuando establecíamos cierta organización y ciertas actividades diarias.En relación a este punto he tendido a olvidar el proceso, es decir, día a día ver qué emerge al vivir y aplicarme en mi estructura y organización, y más bien me enfoqué en ‘poder lograr lo que en mi mente esperaba lograr’, llegar a ese punto de ser activo día a día, y que al no tomar en consideración y abrir las experiencias y pensamientos que diariamente emergían, las resistencias tomaban lugar y me salía de mi estructura, de mi organización…no escribía esto, sólo me enfocaba en poder lograr cumplir mis expectativas acerca de cómo quería vivir mis días, siendo una persona activa que hace muchas cosas en el día.


  • Deseaba y quería no tener reacciones en frente de otras personas, quería ser completamente estable e inquebrantable al hablar o relacionarme con ciertas personas en mi vida que eran difíciles de tratar o mejor dicho que ellas me trataban mal. Debido a querer saltar a ese punto de “tus palabras no me afectan”, reprimía muuuuuuuuuuuuuuuuuchas de las cosas que en mi mente y cuerpo emergían, y perdía muchas dimensiones, muchas piezas de información acerca de mis propias reacciones, de mis propios pensamientos. Hoy por hoy no sucede lo mismo, ya que caminé un constructo mental sobre aquella persona, pero día a día tengo ciertas reacciones de superioridad, inferioridad, resentimiento, enojo, culpa que, por supuesto, requiero tomar responsabilidad de, y cambiarme a mí mismo.


Entonces, hay mucho trabajo para mí por hacer, muchos constructos, muchos sistemas, muchos patrones de reacción y pensamiento a tomar responsabilidad y corregir. Y mucho de esto emerge y surge día a día, así que:

Me perdono a mí mismo por aceptarme y permitirme a mí mismo medir mi proceso y dónde me encuentro en mi proceso de acuerdo al tiempo; a dónde me encuentro ahora, dónde me encontraba ayer, dónde me encontraré mañana, dentro de la creencia de que si hoy me levanto con respecto a un punto, significa que ‘ya lo he trascendido’, ‘ya he avanzado’ en mi proceso, cuando de hecho la realidad es que no es así. El proceso no es medido por el tiempo, sino por el MOVIMIENTO DE UNO MISMO, y tal y como lo dijo Bernard cuando estaba vivo: es una acumulación que uno hace, es la ecuación matemática simple de ‘1+1+1+1 = uno mismo’.

Me perdono a mí mismo por NO aceptarme y permitirme a mí mismo ver, darme cuenta y entender la ecuación de la igualdad y que al tomar responsabilidad de un punto que podría llamar el movimiento de la mente y transformar ese punto en movimiento de uno mismo, ok, entonces qué estoy acumulando en ese movimiento, de qué manera he tomado responsabilidad del punto y qué estoy ganando en ese movimiento en términos de mí mismo, lo cual tiene que ver con quien soy en lo que hago – eso es lo que acumulo en el movimiento, ya sea movimiento mental o movimiento de uno mismo.

Me perdono a mí mismo por no aceptarme y permitirme a mí mismo moverme día a día, en términos de transformar el movimiento mental en movimiento de uno mismo al parar patrones de pensamientos, reacciones, hábitos, conductas que no son lo que es mejor para todos a través de la introspección, investigación, tomar responsabilidad, perdón a uno mismo y cambio práctico, o sea eso es movimiento de uno mismo.

Me perdono a mí mismo por no aceptarme y permitirme a mí mismo vivir y aplicarme constante y consistentemente para acumularme A MÍ MISMO; ese movimiento de la consciencia de mí mismo a hacer introspección, investigación, perdón y cambio práctico, lo cual es vivir palabras como yo mismo.

En el momento y cuando me vea reaccionando a mi proceso en relación a cuánto tiempo llevo en cierto patrón, me detengo y respiro. Me doy cuenta que no se trata acerca del tiempo, sino acerca del movimiento de mí mismo. Me comprometo a mí mismo a preguntarme ¿cuánto tiempo, atención y esfuerzo he dedicado al patrón en sí? Y abrir el punto para de hecho comenzar a crear el cambio a través del movimiento de mí mismo.

Me comprometo a mí mismo a diariamente recordarme moverme a mí mismo a escribir, hacer introspección, investigar, tomar responsabilidad, perdonar y cambiar a través de vivir palabras como yo mismo.

Me comprometo a mí mismo a medir mi proceso en cuanto a cuánto me he movido yo mismo en relación a cierto intervalo de tiempo, reconociendo que no tiene que ver con el tiempo o en cuánto tiempo tengo que trascender un punto, sino más bien en ver cuánto me he movido a mí mismo en cierto tiempo en relación a cierto punto, para de hecho evaluar si requiero abrir más el punto para dar lugar al cambio, si estoy satisfecho con el movimiento y el cambio logrado hasta ahora, qué más puedo seguir mejorando, etc.

lunes, 2 de enero de 2017

Y vos, ¿cuántas veces te diste por vencido? - Día 315


Hoy estuve hablando / sonando el perdón a uno mismo sobre la experiencia de darme por vencido, material que está disponible en EQAFE, por ahora en inglés, pero seguro que en unas semanas estará en español…a medida que sonaba el perdón sobre la experiencia se abrió dentro de mí la comprensión de que si voy a ceder o darme por vencido en una experiencia, ya sea mental o física, sea abrumadora o sutil – esto se aplica igualmente sobre ciertos pensamientos en mi mente – voy a tener que, literalmente, volver a confrontar ese momento, volver a confrontar con la experiencia, volver a confrontar con los pensamientos.

Al ver este punto, lo reflexioné e introspeccioné al grado de ver, darme cuenta y entender que, muchos de los ciclos que aún estoy viviendo, de patrones de conducta y hábitos que en algún momento quise cambiar, al igual que algunas experiencias que no quise ya tener o experimentar, todavía siguen albergando en mi mente y en mi cuerpo porque en los momentos difíciles, se podría decir, en esos momentos donde yo sabía que tenía que cambiar, yo sabía que estaba en el punto culminante donde, ese momento definiría quién soy; ¿voy a seguir siendo un adicto a la experiencia? ¿Voy a continuar permitiendo y aceptando que mi mente; aquellos pensamientos en los que participé, aquellas experiencias a las que cedí y le di el poder y autoridad en algún momento, me definan? ¿Voy a continuar permitiendo y aceptando que mi límite sea esa experiencia de darme por vencido, esa experiencia de sentirme abrumado, aquellos pensamientos que emergen en mi mente que me dicen “ya fue”, “no puedo hacerlo”, “realmente no quiero continuar”, “la próxima será”, “no puedo contra esto”, etc.?

Esto es algo que nos podemos preguntar al traer a nuestra mente esos momentos cruciales y definitivos donde nos dimos por vencido o cedimos a los pensamientos y las experiencias emocionales o sentimentales - ¿por qué me di por vencido? ¿Por qué me acepté y me permití que tales experiencias y pensamientos sean mi límite? ¿Por qué he definido como ‘mis límites’ aquellas experiencias y pensamientos? ¿Por qué no ir más allá de esas experiencias y pensamientos? ¿Quién soy yo al aceptarme y permitirme darme por vencido en tales pensamientos y experiencias? ¿En quién me convierten? ¿Por qué me permití y me acepté convertirme en eso? ¿Por qué no ir más allá de mis límites? ¿Por qué no vivir la palabra expansión de mí mismo al ir más allá de aquellos pensamientos y experiencias?

Me comprometo a mí mismo a investigar y hacer introspección sobre aquellos patrones de pensamiento, reacciones y comportamientos que me he aceptado y permitido darme por vencido y definirme en y como ellos, para perdonarlos y redefinir quién voy a ser en tales momentos al vivir prácticamente la solución / el cambio.

Me comprometo a mí mismo a parar los ciclos de tratar de cambiar y darme por vencido, al realmente investigar y hacer introspección sobre aquellos puntos para reflexionar en quién me he convertido y de hecho cambiar quién soy en pensamiento, palabra y acción en tales momentos.

Me comprometo a mí mismo a recordar que en los momentos cruciales y culminantes de un patrón, donde estoy llegando al punto de querer ceder y darme por vencido, que si cedo y me doy por vencido en tales experiencias, voy a continuar ciclando y reciclando en el mismo patrón por días, meses y hasta años, sin, de hecho, hacer un cambio real y sustancial.

Me comprometo a mí mismo a preguntarme en tales momentos ¿en quién me convierte darme por vencido en tales experiencias y pensamientos en mi mente y cuerpo? ¿Quién quiero ser yo en este momento?