Dejaré por
un momento de caminar mi participación en las redes sociales y caminaré mi
participación en el viaje que estoy andando y que mañana llegaré a mi destino,
al pueblo donde mis padres nacieron y pasaré las fechas festivas allí.
Miedo a morir en un Accidente de Autos
Antes de
emprender el viaje que estoy haciendo hoy, me he montado en mi mente a través
de conocimiento e información toda una idea de que podría llegar a morir,
comenzaré por lo principal, una de las películas que vi en la infancia fue
Freddy Kruger y algo que siempre he tenido presente es la escena donde el
hombre anda por una ruta en auto rodeando la montaña y cae golpeando el guardarrail, que estaba delimitando el borde de la ruta, esa secuencia la he conectado
a la creencia de que moriría de esa manera, que es mi destino morir de esa
manera y otra secuencia que recuerdo es cuando estábamos rodeando una montaña a
salir de Ushuaia que mi papá casi choca con otro vehículo en el giro, ya que no
se veía si venía alguien de frente, las palabras ‘tene cuidado!’ fue cuando
definitivamente imprimí en mí el miedo a chocar. Ahora, en éstos tiempos de
‘desastres naturales’, he creído que si viajaba en éstas fechas podría llegar a
morir, porque oh, todo va a ser un desastre y debo estar en un lugar seguro
donde no pueda pasarme nada, ‘Ésta vez sí me va a pasar algo’ – volviendo a lo
de hace un rato, mi papá pasó un auto y se veía uno de frente, pude ver que he
temido que no llegue y entonces choque de frente, y he estado recreando eso en
mi mente, de que un auto de frente viene y chocamos, o que mi papá gira el auto
para salvarme solamente a mí, y también el impacto de un auto por detrás, si
eso podría ser capaz de pasar yo entonces saldría por delante para salvarme,
pienso en dos autos de frente, un auto pasando de largo por el guardarrail, un
auto destruido. Me he quedado mirando con seguridad de que esté lejos y no haya
riesgos de choque. Así que luego de eso, me quedo recreando en mi mente tales
escenas en mi mente y realmente no tiene sentido hacerlo.
Me perdono a
mí mismo el haberme acepado y permitido la idea de que podría llegar a morir en
un accidente de autos si viajo en vehículo para buscar en mi mente maneras en
que podría llegar a morir, para entonces crearme una experiencia de miedo por
ello y así mantener tal idea presente en el viaje – esencialmente para que no
suceda.
En el
momento y cuando me vea ideando que podría llegar a morir en un accidente de
autos si viajo en vehículo – me detengo y respiro. Me doy cuenta que es
irrelevante tener presente tal idea, ya que simplemente no me apoyo a mí mismo
a estar aquí y estar estable en el viaje.
Me
comprometo a mí mismo a traerme aquí con el respiro incondicionalmente y
mantenerme estable como el respiro, antes, mientras y después del viaje,
deteniendo toda participación en mi mente en relación a la idea de morir en un
accidente y realmente disfrutar del viaje.
Me perdono a
mí mismo el haberme aceptado y permitido creer que mi destino es morir cayendo
por la delimitación de una ruta en subida de una montaña, golpeando el guardarrail, para al estar en tales escenarios creer que me va a ocurrir tal evento,
para entones crearme una experiencia de ansiedad por ello y así generarme todo
un conflicto interno cuando esté en tal escenario.
En el
momento y cuando me vea creyendo que mi destino es morir cayendo por la
delimitación de una ruta en subida de una montaña, golpeando el guardarrail –
me detengo y respiro. Me doy cuenta que mi destino es determinado por mí mismo
en términos de mi participación en ésta existencia, más no es posible conocer
mi muerte en sí misma por el hecho de que todo y cuanto existe aquí también
participa en esta realidad y la muerte natural no es posible conocer antes, es
decir que es impredecible, por ende no tiene sentido creer cómo moriré, ya que
participo en mi mente para ignorar que estoy aquí respirando y que realmente
puedo ver físicamente nuestro andar.
Me
comprometo a mí mismo a traerme aquí con el respiro y determinar mi destino
aquí, en cada momento de respiro, asegurándome que detengo mi participación en
toda creencia de cuál es mi destino y simplemente dirigirme como principio
director de mí mismo en cada respiro y si estoy en viaje, traer mi
participación a lo físico en todo sentido para disfrutar mi viaje y el andar.
Me perdono a
mí mismo el haberme aceptado y permitido imaginarme que aparece un auto delante
de repente en la ruta para crearme una experiencia de desesperación por no ver
si hay o no un vehículo y así cuando pasamos, crearme una experiencia de alivio
porque no pasó nada y así sentirme seguro como burlando a la muerte/mi propio
engaño.
En el
momento y cuando me vea imaginándome que aparece un auto delante de repente en
la ruta – me detengo y respiro. Me doy cuenta que participo en tal imaginación
para así crearme una experiencia negativa para finalmente crearme una
experiencia positiva de ello, es decir, no tiene sentido participar en tal
imaginación en lo absoluto, desconsidero completamente disfrutar del viaje y
ser práctico de hecho, es decir, el que está conduciendo cubre tal punto y
definitivamente yo puedo considerar aplicaciones prácticas en el viaje.
Me
comprometo a mí mismo a estabilizarme como el respiro y disfrutar del viaje, de
principio a fin, y ser práctico en términos de tareas/actividades y
aplicaciones que puedo hacer mientras estoy en viaje.
Más en el
próximo blog
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