Este post
es continuación de la serie de blogs que he publicado de Interacción con Mujeres y deseo sexual
Ayer iba yendo para el supermercado
y me he cruzado con mujeres en el camino, cuando veía que eran mujeres,
desviaba mi mirada hacia sus piernas o sus traseros, o al ver que llevaban ropa
ajustada o pegada al cuerpo, éste comportamiento se manifestaba, de yo
inconscientemente/automáticamente mirarles el trasero o las piernas. Al notar
este punto, me di cuenta que ‘no hay una experiencia en sí’ hacia el ver el
trasero o las piernas de las mujeres, sino más bien que tengo que instigar la
experiencia, que tengo que instigar el pensamiento para generar la experiencia,
tengo que instigar la creencia, mis chats mentales, las ideas, la imaginación
para generar la experiencia, de lo contrario ‘no encontraría nada’ y
simplemente sería este comportamiento automático/hábito de mirarles el trasero
o las piernas sin experiencia alguna. La razón por la cual al ver el trasero o
las piernas no tengo experiencia y tengo que instigarla a través del
pensamiento, es debido a ya haber caminado este proceso por más de un año de
detener creencias, ideas, pensamientos, imaginaciones, chats mentales, la
pornografía, escenas en mi mente dentro de la consideración de la mujer como ‘un
ser humano igual a mí’, ‘un cuerpo físico hecho de carne y hueso igual a mí’, ‘una
forma física igual a mí’, ‘es vida, igual que yo’.
Lo que entendí a través de ver éste
evento y experiencia es que a través del hábito que generé (que de hecho, no
conozco hombre que no lo haga, lol) no es el punto ‘verle el trasero en sí’,
como también cuando caminaba los puntos por los cuales tenía una erección, no
es las imágenes o imaginaciones, o lo que se ve – es en realidad la energía
asociada a lo que veo. Referencié esto con mi compañera y me dijo esto:
“exactamente
y esto aplica en general a TODO, por eso podemos hacer de todo una experiencia,
y nos podemos hacer adictos a cualquier cosa. Es la EXPERIENCIA!! lo que hay
que identificar y parar,
parar
el 'se siente bien'”
Y ciertamente es así. Así que, para
ti que estás dispuesto a parar de sexualizar a las mujeres, a parar de
masturbarte y tener sexo con pornografía, imágenes, fotografías, escenas y
fantasías en tu mente, que realmente estás dispuesto a considerar a las mujeres
como iguales, como seres humanos, como terrícolas, como parte de la vida en la
tierra – entonces tengo un proceso para ti, que puedes caminar: es escribir acerca
de todas esas imágenes, fotografías, escenas, imaginaciones, pornografía en tu
mente, y qué lo gatilla y luego especificar las experiencias que esto te da, la
razón por la cual tú ‘actúas’, en otras palabras: qué experiencias energéticas
asociaste a las acciones de ver mujeres, de ver pornografía, de lo que emerge
en tu mente como imágenes, fantasías, pornografía, fotografías, escenas –
porque, ciertamente, no es lo que ves la razón por la cual ‘haces lo que haces’,
es la experiencia que uno asoció a lo que ve y a lo que piensa, son las
creencias, ideas y percepciones que uno usa para llegar a una experiencia y que
también están asociados a una experiencia, y eso es lo que uno debe parar,
parar el mentalizar la realidad, parar el energetizar la realidad, parar el
vivir por y para la energía – y más bien vive por y para lo que es mejor para
toda la vida, en consideración, respeto e integridad.
Así que, éste proceso de disociar y
parar las acciones que uno se ha aceptado y permitido porque ‘hay una
experiencia de recompensa’ o ‘hay una experiencia que compensa’ lo que ‘no pudimos
conseguir o lograr de otra situación o evento’ – a través del perdón a uno
mismo, compromiso de corrección y cambio junto con la aplicación práctica correctiva.
Aplicación de Perdón a uno Mismo
Me perdono a mí mismo el haberme
aceptado y permitido a mí mismo crear el hábito de mirar el trasero y/o las
piernas a la mujer, al ver a una mujer, por haber creado en primer lugar una
experiencia de deseo, excitación y satisfacción al ver traseros de mujeres, y a
través de tal acción, me gustó la experiencia que tuve al mirar traseros de
mujeres, me gustó clasificarlos, juzgarlos, imaginar mi experiencia con tal
mujer, separar mujeres, hacer a las mujeres más de lo que son, sentirme
superior al estar con mujeres que he asociado que son más por las asociaciones
de belleza o de ‘mejor cuerpo’ que otras, o también que de acuerdo a la ropa
que llevan son más lindas o me crean excitación y deseo, todo esto dentro del
punto de partida de ‘sentirme bien’ a través de asociar a más y más palabras,
imágenes, imaginaciones, ideas, creencias, percepciones estas experiencias de
deseo, satisfacción, superioridad, placer y excitación, y esto en realidad ha
sido por mí mismo, he sido yo mismo quien ha asociado, construido, creado y
generado las experiencias y los pensamientos deliberadamente, sin darme cuenta
que ahora que he caminado este proceso de disociar a los pensamientos y
palabras de la energía, y de parar mi participación en la energía, todavía
existe este comportamiento automatizado/hábito/punto a nivel inconsciente que
no se detendrá por sí solo, ya que éste está existiendo a nivel físico, y como
tal, está manifestándose por yo mismo no levantarme como el principio directivo
y dirigir mi físico, mi atención activamente, sino que he dejado que esto sea
dirigido y controlado por mi mente inconsciente para un deliberado sabotaje a
mí mismo.
Me perdono a mí mismo el haberme
aceptado y permitido a mí mismo al mirar un trasero y/o piernas a una mujer,
instigar una experiencia de deseo, satisfacción, placer o excitación al seguir
asociando los físicos de las mujeres a tales experiencias, porque así puedo al
ir mirando a las mujeres tener estas experiencias a través de instigar
pensamientos, ideas, percepciones y creencias para generar las experiencias que
mencioné, sin darme cuenta que soy yo mismo quien estuvo instigando, generando
y creando tales asociaciones de mujeres a tales experiencias y que por tanto,
dentro de esto, me doy cuenta de mi deliberada participación en la construcción
de mi mente como energía, al seguir actuando en base a una experiencia y al
seguir construyéndola y acumulándola dentro de mí mismo.
Me doy cuenta que toda experiencia
que uno tenga hacia algo o alguien, es deliberadamente creada, generada,
construida, acumulada y asociada, lo cual evidencia que cada uno de nosotros
que tenemos una mente somos los que diseñamos nuestra propia mente, somos
totalmente responsables de nuestras acciones, palabras, reacciones y
pensamientos.
Aplicación Correctiva y Compromisos
En el momento y cuando me vea
mirando el trasero y/o piernas a una mujer, o simplemente al mirar a una mujer
automáticamente – me detengo y respiro. Me doy cuenta que no estoy participando
activamente en la realidad, dirigiendo mi mirada y así también mi cuerpo físico
como yo mismo y en su lugar, todavía estoy permitiendo y aceptando la mente
dirigirme, por lo tanto para mí, este es un aviso de ‘no estás dirigiendo tu
participación activamente aquí en lo físico, todavía estás buscando instigar
una experiencia dentro de ti’, por lo tanto:
Me comprometo a mí mismo a dirigir
mi participación aquí en lo físico activamente, siendo consciente de a dónde
miro y mirándolo dentro del punto de partida de ‘ya no estar mirando por y para
instigar una experiencia’ o ‘por automatización de la mente’, sino más bien por
‘yo estar aquí en y como mi cuerpo físico participando activamente sin
necesidad de ir tras una experiencia o pensamientos, sólo mirando lo que está
aquí mientras camino de manera estable’
En el momento y cuando me vea
mirando un trasero y/o piernas a una mujer para instigar una experiencia de
deseo, satisfacción, placer o excitación – me detengo y respiro. Me doy cuenta
que todavía estoy buscando generar una experiencia dentro de mí, por lo tanto:
Me comprometo a mí mismo a
identificar la experiencia y el punto que estoy usando dentro y fuera de mí
para ‘instigar la experiencia’ para entonces caminar perdón a uno mismo inmediatamente
por la asociación, porque ‘ya no acepto ni permito mantenerme generando
experiencias hacia la realidad, porque eso me lleva a no estar aquí con mi
cuerpo físico, viviendo respiro a respiro como la vida’, perdiendo integridad y,
el respeto y la consideración por otros seres humanos como yo mismo.
Me comprometo a mí mismo a reconocer
que yo mismo estoy permitiendo a la mente dirigirme por energía y por ‘no
querer tomar responsabilidad de mí mismo’ de participar activamente en lo
físico, por lo tanto – me comprometo a mí mismo a reconocer esta abdicación de
responsabilidad de mí mismo hacia la mente y entonces levantarme igual y uno a
y como mi mente, como absoluto responsable y así dirigirme igual y uno a parar
y cambiar a través de los compromisos y aplicación correctiva que establecí.