martes, 30 de abril de 2013

Día 151 – Puede las consecuencias de imaginar qué falta volverse una solución?

Éste post es la continuación de la Serie Desarrollando Disciplina con Uno Mismo:

|Dimensión de Imaginación:


||Imagino las consecuencias de qué pasa si no lo hago ahora a lo me que falta hacer, como viendo qué pasa si no participo.

Problema:

El problema con imaginarme las consecuencias de qué pasa si no lo hago ahora a lo que me falta hacer, como viendo qué pasa si no participo es que genero toda una reacción momentánea, es decir, al surgir simplemente reacciono a ella con apuro, y en ello es como todo un punto de fricción y conflicto al momento de hacer una aplicación o al haber tomado mi decisión de en qué aplicarme.

Solución:

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo manipularme a mí mismo a reaccionar con apuro al imaginarme las consecuencias de qué pasa si no lo hago ahora a lo que me falta hacer, como viendo qué pasa si no participo, al estar haciendo una aplicación o al haber tomado mi decisión de en qué aplicarme, ya que al hacerlo instantáneamente por el hecho de que surgió en mi mente, puedo generar todo el conflicto y fricción interna, es como el hecho de que me haya faltado que reacciono con apuro, y en ello no considero nada más, es decir, no me doy tiempo siquiera de considerar el ver todo el plano de mi día y consecuencias, la relevancia de las tareas a realizar a qué tiempo o momento, lo cual será la llave para comenzar a moverme bajo la consideración de qué es requerido hacerse.

En el momento y cuando me vea a mí mismo manipulándome a mí mismo a reaccionar con apuro al imaginarme las consecuencias de qué pasa si no lo hago ahora a lo que me falta hacer, como viendo qué pasa si no participo, al estar haciendo una aplicación o al haber tomado mi decisión de en qué aplicarme – me detengo y respiro. Me doy cuenta que puedo estabilizarme a mí mismo primeramente, ya que el reaccionar es irrelevante de hecho, entonces al surgir esta imaginación puedo alinear mi punto de partida a qué es requerido hacerse como responsabilidad de mí mismo, y en ello voy alineando mi día, mis aplicaciones de acuerdo a ir priorizando lo que realmente requiere ser terminado cuanto antes, e ir colocando las aplicaciones de acuerdo a esa prioridad, y entonces si veo que hay alguna que no pueda hacer pero que no sea relevante a tener terminada o hecha, la descarto para luego ver dónde hacerlo o terminarlo dentro de mi horario.

Me comprometo a mí mismo a traerme al respiro y volverme consciente de mi cuerpo físico humano y mi entorno, y distribuyo la energía a todo mi cuerpo físico respirando, estabilizándome y entonces veo mi imaginación estable y alineo mi punto de partida a qué es requerido hacerse, y así, al ir viendo mi imaginación me aseguro de que he establecido lo que es prioridad primero a realizar y aplicarme, y simplemente lo camino a mi día, caminando mis compromisos correctivos – sólo caminar para ver si puedo realizar todas mis tareas y aplicaciones, y si no, al final del día voy a re-ajustar mis tareas y horarios.

Recompensa:

De esta manera puedo llegar a ver consecuencias sin reaccionar, en esencia dándome la oportunidad de que al ver mi imaginación pueda considerar más que sólo aquello en mi imaginación, todo el contexto de mi aplicación y tareas, e ir entonces priorizando realmente lo que es requerido hacerse e ir dejando para el final lo que no, y así voy re-organizando y reajustando mis tareas y horarios para una aplicación total a qué es requerido hacerse.

En el próximo post comenzaré a caminar la dimensión de pensamiento de mi personaje preocupado por hacer algo.

Gracias.

domingo, 28 de abril de 2013

Día 150 – De verte en la próxima tarea a disciplinarte en tus tareas

Éste post es la continuación de la Serie Desarrollando Disciplina con Uno Mismo:

|Dimensión de Imaginación:

||Me imagino a mí mismo haciendo la tarea o trabajo que sigue después de la que estoy haciendo.

Problema:

El problema con imaginarme a mí mismo haciendo la tarea o trabajo que sigue después de la que estoy haciendo es que me manipulo a mí mismo a generar una experiencia de apuro con ello, como ‘tengo que apurarme para la próxima tarea’ sea por no haber terminado o por querer hacer más de la misma tarea, como también me manipulo a mí mismo a terminar antes del tiempo que había establecido para mi tarea, es decir, abandonarla antes de tiempo para hacer la otra.

Solución:

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo manipularme a mí mismo a generar toda una experiencia de apuro al imaginarme a mí mismo haciendo la tarea o trabajo que sigue después de la que estoy haciendo, al darme cuenta que no terminaré a tiempo o por querer hacer más de la misma tarea, ya que así lo hago bajo conflicto y fricción interna, bajo presión en esencia, la presión que estoy ejerciendo hacia mí mismo en ese esfuerzo por terminar, en donde de hecho lo que no estoy considerando es, quién estableció el horario? quién gestiona mi horario? lol, momento de tomar una decisión de apoyo.

En el momento y cuando me vea a mí mismo manipulándome a mí mismo a generar toda una experiencia de apuro al imaginarme a mí mismo haciendo la tarea o trabajo que sigue después de la que estoy haciendo, al darme cuenta que no terminaré a tiempo o por querer hacer más de la misma tarea – me detengo y respiro. Me doy cuenta que en estos casos lo relevante es ver cuál es requerida hacer cuanto antes, y al estar haciéndola, evaluar cuánto puedo avanzar en cierta cantidad de tiempo, y así realmente transformando mi punto de partida a hacer lo que se requiere ser hecho, y conocer cuánto llegaría a tardar en hacerlo para luego hacer lo demás, considerando también agregar o hacer más cosas luego, haciendo un horario real respecto a cuánto me lleva.

Me comprometo a mí mismo a traerme al respiro y volverme consciente de mi cuerpo físico humano, distribuyendo la energía a todo mi cuerpo físico, estabilizándome mientras alineo mi punto de partida a hacer aquello que requiere ser hecho cuanto antes, y entonces veo dentro de mí mismo qué priorizar para entonces hacerlo, y luego hacer la otra que he dejado pendiente respecto a la cuál es realmente requerida hacer, y si mi punto de partida es hacer más de la misma tarea, me detengo y camino la tarea hasta terminar el tiempo y sigo con la próxima simplemente.

Me comprometo a mí mismo a caminar y aplicarme primeramente en mi día sobre aquello que no quiero hacer o que es requerido priorizarlas en el día o a tenerlas realmente listas, alineando mi horario diario a hacer lo que realmente se requiere ser hecho en el día primero.

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo manipularme a mí mismo a abandonar la tarea antes de tiempo, al imaginarme a mí mismo haciendo la tarea o trabajo que sigue después de la que estoy haciendo, al ver la hora y darme cuenta que falta poco tiempo para la próxima tarea, ya que así puedo seguir con la otra tarea cuanto antes, y quiero decir, detrás de abandonar la tarea está de hecho el interés por la otra tarea que por considerar caminar mi decisión, es decir todo un punto de interés por la otra tarea en mi mente por lo que es el deseo por la otra tarea lo que me mueve a abandonar la tarea antes de tiempo de hecho.

En el momento y cuando me vea a mí mismo manipulándome a mí mismo a abandonar la tarea antes de tiempo, al imaginarme a mí mismo haciendo la tarea o trabajo que sigue después de la que estoy haciendo, al ver la hora y darme cuenta que falta poco tiempo para la próxima tarea – me detengo y respiro. Me doy cuenta que puedo transformar el momento de ver la hora a referenciar cuánto tiempo me queda y seguir con mi tarea actual, es decir, deteniendo cualquier punto de abandonarlo y si es requerido terminarla, hacer una evaluación respecto a mis tareas para asegurarme si habrá consecuencias o un buen resultado.

Me comprometo a mí mismo a traerme al respiro y volverme consciente de mi cuerpo físico humano y mi entorno, y al ver la hora, hacerlo desde el punto de partida de referenciar cuánto tiempo me queda, deteniendo todo punto de búsqueda por abandonar mi tarea actual y me apego al horario establecido, y evaluar respecto a lo que me queda por hacer, y en ello reviso si realmente es relevante seguir más o no de la hora establecida y evalúo las consecuencias de terminarlo y tomar tiempo de otra tarea o de mi día, y entonces si realmente está ok, lo hago, si no, no lo hago y me apego a mi plataforma establecida.

Recompensa:
De esta manera detengo el conflicto interno por no terminar y realmente me vuelvo consciente de los resultados y las consecuencias e ir adecuándome a qué es requerido hacerse como también a terminar las tareas si puedo con un poco más de tiempo, y en ello realmente puedo tener mis tareas hechas como también al ver la hora tomarlo como referencia voy a tener un entendimiento de cuánto me tomo hacer mi aplicación e ir modificando mi horario para ir agregando o acomodando mis tareas y trabajos, y el punto de hacer primero lo que es relevante tenerlo hecho en el día como también lo que no me gusta podré realmente tenerlo hecho y hasta cambiar mi relación con tal tarea o trabajo o actividad.

En el próximo post seguiré caminando la dimensión de imaginación de mi personaje preocupado por hacer algo.

Gracias.

sábado, 27 de abril de 2013

Día 149 – Te ves en la próxima tarea a realizar?

Éste post es la continuación de la Serie Desarrollando Disciplina con Uno Mismo:

|Dimensión de Imaginación:

||Me imagino a mí mismo haciendo la tarea o trabajo que sigue después de la que estoy haciendo.

Problema:

El problema con imaginarme a mí mismo haciendo la tarea o trabajo que sigue después de la que estoy haciendo es que me manipulo a mí mismo a generar una experiencia de apuro con ello, como ‘tengo que apurarme para la próxima tarea’ sea por no haber terminado o por querer hacer más de la misma tarea, como también me manipulo a mí mismo a terminar antes del tiempo que había establecido para mi tarea, es decir, abandonarla antes de tiempo para hacer la otra.

Solución:

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo manipularme a mí mismo a generar toda una experiencia de apuro al imaginarme a mí mismo haciendo la tarea o trabajo que sigue después de la que estoy haciendo, al darme cuenta que no terminaré a tiempo o por querer hacer más de la misma tarea, ya que así lo hago bajo conflicto y fricción interna, bajo presión en esencia, la presión que estoy ejerciendo hacia mí mismo en ese esfuerzo por terminar, en donde de hecho lo que no estoy considerando es, quién estableció el horario? quién gestiona mi horario? lol, momento de tomar una decisión de apoyo.

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo manipularme a mí mismo a abandonar la tarea antes de tiempo, al imaginarme a mí mismo haciendo la tarea o trabajo que sigue después de la que estoy haciendo, al ver la hora y darme cuenta que falta poco tiempo para la próxima tarea, ya que así puedo seguir con la otra tarea cuanto antes, y quiero decir, detrás de abandonar la tarea está de hecho el interés por la otra tarea que por considerar caminar mi decisión, es decir todo un punto de interés por la otra tarea en mi mente por lo que es el deseo por la otra tarea lo que me mueve a abandonar la tarea antes de tiempo de hecho.

En el próximo post seguiré caminando la dimensión de imaginación de mi personaje preocupado por hacer algo.

Gracias.

viernes, 26 de abril de 2013

Día 148 – Cómo no hacer de la imaginación un punto de distracción en tus tareas?

Éste post es la continuación de la Serie Desarrollando Disciplina con Uno Mismo:

|Dimensión de Imaginación:


||Me Imagino a mí mismo haciendo algo que no hice.

Problema:
El problema con esta imaginación es que en el momento que decido priorizar una tarea o trabajo debido a ver las consecuencias de qué pasa si realmente no lo hago en estos momentos, surge aquello que no hice cuando camino mi decisión, o cuando estoy por caminarla, y de esa manera me manipulo a mí mismo a no caminar mi decisión sino a estar en mi mente imaginando y perdiendo atención a lo que requiere ser hecho como también a darle tanta consideración que comienzo a reaccionar por mi propia naturaleza, por la imaginación en sí misma y en esto me llevo a hacer lo que no hice.

Solución:

En el momento y cuando me vea a mí mismo manipulándome a mí mismo a seguir mi imaginación para no caminar la decisión hecha, al imaginarme a mí mismo haciendo algo que no hice, al estar por caminar la consideración y decisión tomada de aplicación de una tarea o trabajo o al estar caminando la decisión – me detengo y respiro. Me doy cuenta que se vuelve totalmente una distracción para mi aplicación actual requerida, lo cual mi mente se vuelve todo este punto de distracción porque no la he usado como una herramienta, ya que de hecho puedo tomarla para constructivamente crear imaginación, he decidido qué hacer porque es requerido, lo que me falta hacer será hecho en otro momento y si eso que me falta hacer es algo que había olvidado o no considerado, entonces camino el proceso de ver consecuencias y qué decidir de acuerdo a ello.

Me comprometo a mí mismo a traerme al respiro, volviéndome consciente de mi cuerpo físico humano y mi entorno, y congelo mi imaginación, veo la naturaleza de la imaginación, me permito y acepto ver consecuencias y si es algo que había desconsiderado u olvidado, entonces decido de acuerdo a si es requerido o no hacerlo pronto y en función de mi decisión, anoto la tarea para el momento que sea necesario revisándolo al final del día en el momento de ajustes y modificación de agenda y tareas, o la hago, y si no es algo a considerar, detengo mi imaginación completamente, transformando lo que veo en mi imaginación a puntos relacionados y relevantes a evaluar u observar de mi aplicación actual dentro de la imaginación.

En el momento y cuando me vea a mí mismo engañándome a mí mismo a creer que tengo que hacer aquello que no hice, al imaginarme a mí mismo haciendo algo que no hice, al estar por caminar la consideración y decisión tomada de aplicación de una tarea o trabajo, o al estar caminando la decisión – me detengo y respiro. Me doy cuenta que puedo detenerme y comenzar a considerar todas las dimensiones y la relevancia de qué es requerido hacerse al mirarlas, ya que de esa manera se vuelve definitivo que camine mi aplicación decidida y entonces usar mi imaginación constructivamente al punto que he decidido es relevante aplicar.

Me comprometo a mí mismo a traerme al respiro, volviéndome consciente de mi cuerpo físico y entorno y congelar mi imaginación, entonces considero las dimensiones que emergieron de mi mente y establezco mi punto de partida – hacer lo que es requerido hacerse y qué es benéfico hacer en el momento – y entonces me permito y acepto ver consecuencias y reafirmo mi decisión de qué voy a caminar, y una vez hecho y moviéndome dentro de mi aplicación, transformo mi imaginación a usarla constructivamente para mi aplicación decidida o actual, considerando todo punto relacionado y relevante a evaluar u observar de mi aplicación dentro de la imaginación.

En el próximo post seguiré caminando la dimensión de imaginación de mi personaje preocupado por hacer algo.

Gracias.

Día 147 – Por qué me imagino haciendo una tarea que no hice?

Éste post es la continuación de la Serie Desarrollando Disciplina con Uno Mismo:

|Dimensión de Imaginación:


||Me Imagino a mí mismo haciendo algo que no hice.

Problema:

El problema con esta imaginación es que en el momento que decido priorizar una tarea o trabajo debido a ver las consecuencias de qué pasa si realmente no lo hago en estos momentos, surge aquello que no hice cuando camino mi decisión, o cuando estoy por caminarla, y de esa manera me manipulo a mí mismo a no caminar mi decisión sino a estar en mi mente imaginando y perdiendo atención a lo que requiere ser hecho como también a darle tanta consideración que comienzo a reaccionar por mi propia naturaleza, por la imaginación en sí misma y en esto me llevo a hacer lo que no hice.

Solución:

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo manipularme a mí mismo a seguir mi imaginación para no caminar la decisión hecha, al imaginarme a mí mismo haciendo algo que no hice, al estar por caminar la consideración y decisión tomada de aplicación de una tarea o trabajo o al estar caminando la decisión, ya que así puedo desvanecer mi atención de lo que requiere ser hecho y seguir en mi mente participando en eso que no hice, cuando de hecho no estoy haciendo nada para manifestarlo o para vivirlo, sino sólo perdiendo mi tiempo de hecho, mis respiros de lo que requiere ser hecho y creando toda una experiencia de deseo a hacer eso que me falta como excusa para no caminar lo que requiere ser hecho.

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo engañarme a mí mismo a creer que tengo que hacer aquello que no hice, al imaginarme a mí mismo haciendo algo que no hice, al estar por caminar la consideración y decisión tomada de aplicación de una tarea o trabajo o al estar caminando la decisión, ya que así puedo dirigirme hacia aquello que no hice, como una costumbre a hacer aquella tarea o trabajo que no hice sin antes considerar qué es requerido, sin antes considerar qué es relevante, qué consecuencias, es decir, simplemente hacerlo como un punto de automatización y desconsiderado hacia cualquier sentido de responsabilidad de qué es requerido y qué es mejor para todos.

En el próximo post seguiré caminando la dimensión de imaginación de mi personaje preocupado por hacer algo.

Gracias.

miércoles, 24 de abril de 2013

Día 146 – De la preocupación a la ocupación de tu responsabilidad

Éste post es la continuación de la Serie Desarrollando Disciplina con Uno Mismo:

|Dimensión de Imaginación:


||Me imagino a mí mismo haciendo algo que me falta hacer.

Problema:

El problema con esta imaginación es que comienzo a darle atención para manipularme a mí mismo a preocuparme sobre aquello que me falta hacer, como viendo ahora, en plena tarea o aplicación o por comenzar una tarea o aplicación otra cosa que es irrelevante o no es requerido ver en este momento, que en honestidad como uno mismo realmente no tiene nada de importante ya que si llega el momento, sería de igual manera hacerlo como lo imaginé, es decir, lo imagine o no, me aplicaré de la misma manera cuando llegue a ello, por ende sólo sigo mirando lo que imagino, como también, lo hago para generar una experiencia de liberación, como ‘ya está hecho’, lol, cuando de hecho tengo que llevarlo a la práctica y entonces genero toda una experiencia de ansiedad para llevarme a hacer lo que imagino.

Solución:

En el momento y cuando me vea manipulándome a mí mismo a preocuparme sobre aquello que me falta hacer, al imaginarme a mí mismo haciendo algo que me falta hacer, al estar aplicándome en una tarea o trabajo o por comenzar una tarea o trabajo – me detengo y respiro. Me doy cuenta que se trata de atención específicamente, en cómo yo puedo cambiar el momento a una puesta a tierra, a aplicarme momento a momento en la tarea o trabajo, como un estar aquí constante y consistente, de controlar el resultado, de dirigir el resultado y corregir mi orientación a preocuparme por cosas que eventualmente haré, sólo que en este momento se trata de enfocarme en mi aplicación actual elegida o que estoy caminando, esa es mi decisión.

Me comprometo a mí mismo a traerme al respiro, tomar una decisión en términos de qué tarea o trabajo voy a hacer, y entonces hacer una puesta a tierra: volviéndome consciente de mi cuerpo físico humano, toco la palma de mis manos y me permito y acepto ver consecuencias de mi decisión, y me muevo a ello si realmente traerá un mejor resultado en mi aplicación, si no, a ver cuál sería más benéfica en este momento, y una vez hecha la decisión, la camino incondicionalmente, consciente de mi mente y físico, caminándola en honestidad como uno mismo, y a medida que me aplico, reviso mi físico, mis músculos y huesos, a través de mover mi cuerpo para permanecer estable, y cuando surge la imaginación y reacción, congelo la imaginación, distribuyo la energía a todo mi cuerpo físico humano, me estabilizo y me permito y acepto ver consecuencias en términos de lo que me muestra mi imaginación evaluándola en honestidad como uno mismo, para tomar una decisión de si seguir mi aplicación o si realmente sería relevante re-considerar cómo caminar mi aplicación y hacerlo.

En el momento y cuando me vea a mí mismo manipulándome a mí mismo a generar una experiencia de liberación al imaginarme a mí mismo haciendo algo que me falta hacer, al estar aplicándome en una tarea o trabajo o por comenzar una tarea o trabajo – me detengo y respiro. Me doy cuenta que la orientación energética que he hecho hacia mi imaginación al estar aplicándome es inútil, es decir, tengo que moverme, siempre tengo que moverme lol, así que definitivamente es momento de simplemente caminar en lo físico y volverme estable en mi relación a la energía, en donde entonces teniendo una puesta a tierra, voy a poder dirigir eficazmente mi mente y físico, considerando voluntad de uno mismo: TENGO QUE MOVERME.

Me comprometo a mí mismo a traerme al respiro y congelar mi imaginación, distribuir la energía a todo mi cuerpo respirando, estabilizarme y volverme consciente de mi físico, moviendo mi físico para testear mis músculos y articulaciones, y entonces veo la naturaleza de mi imaginación, en términos de qué me muestra de la aplicación que me falta y yo mismo, me acepto y permito ver consecuencias, si es irrelevante a considerar, la dejo ir, si no, entonces la anoto para el momento de cuando llegue allí, y una vez hecho, me libero de la imaginación y continúo mi aplicación elegida.

Recompensa:

De esta manera mi imaginación no se torna una posesión para que yo vaya tras ella, sino que primeramente mi punto de partida es la decisión de caminar mi aplicación elegida, realmente moviéndome para realizar las tareas o trabajos, luego vería consecuencias que es la manera de hacerme consciente de mi aplicación de hecho, de los resultados que a través de mi voluntad, se vuelve una fortaleza para mí para realmente hacer aquello que es requerido en el momento y que será benéfico para mí, todo dentro de la disciplina conmigo mismo, lo cual es fascinante, honestidad como uno mismo en este desarrollo hará que realmente re-considere cómo moverme y qué pensar o hacer, para entonces traer tal resultado que sea mejor para todos.

En el próximo post seguiré caminando la dimensión de imaginación de mi personaje preocupado por hacer algo.

Gracias.

martes, 23 de abril de 2013

Día 145 – Te falta hacer algo y quieres abandonar tu responsabilidad?

Éste post es la continuación de la Serie Desarrollando Disciplina con Uno Mismo:

|Dimensión de Imaginación:

 
||Me imagino a mí mismo haciendo algo que me falta hacer.

Problema:

El problema con esta imaginación es que comienzo a darle atención para manipularme a mí mismo a preocuparme sobre aquello que me falta hacer, como viendo ahora, en plena tarea o aplicación o por comenzar una tarea o aplicación otra cosa que es irrelevante o no es requerido ver en este momento, que en honestidad como uno mismo realmente no tiene nada de importante ya que si llega el momento, sería de igual manera hacerlo como lo imaginé, es decir, lo imagine o no, me aplicaré de la misma manera cuando llegue a ello, por ende sólo sigo mirando lo que imagino, como también, lo hago para generar una experiencia de liberación, como ‘ya está hecho’, lol, cuando de hecho tengo que llevarlo a la práctica y entonces genero toda una experiencia de ansiedad para llevarme a hacer lo que imagino.

Solución:

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo manipularme a mí mismo a preocuparme sobre aquello que me falta hacer, al imaginarme a mí mismo haciendo algo que me falta hacer, al estar aplicándome en una tarea o trabajo o por comenzar una tarea o trabajo, ya que así puedo en mi mente proyectarme a mí mismo haciéndola como diciéndome ‘es así como tengo que hacerlo’ para preocuparme por no estar haciéndolo en este momento, al ya saber cómo hacerlo o que tengo que ir a hacerlo para dejar de prestar atención a mi tarea o trabajo de aplicación actual y así eventualmente abandonarla, por el conflicto interno de deseo de hacer aquello que me falta hacer.

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo manipularme a mí mismo a generar una experiencia de liberación al imaginarme a mí mismo haciendo algo que me falta hacer, al estar aplicándome en una tarea o trabajo o por comenzar una tarea o trabajo, ya que así puedo sentirme como ‘ya está hecho’ en mi mente y de esa manera al volverme a lo físico, experimento todo un conflicto y fricción interna porque realmente no está hecho, generando así una experiencia de ansiedad por aquello que todavía me falta hacer para desconsiderar mi tarea o aplicación actual y abandonarla, y así ir tras lo que en mi mente me veo haciendo/me falta hacer, cuando de hecho puedo hacerlo al terminar mi tarea o trabajo actual.

En el próximo post seguiré caminando la dimensión de imaginación de mi personaje preocupado por hacer algo.

Gracias.

lunes, 22 de abril de 2013

Día 144 – Cómo dominar la imaginación al hacer tus tareas o trabajo?

Éste post es la continuación de:


|Dimensión de Imaginación:


||Me Imagino a mí mismo haciendo algo que me gustaría hacer.

Problema:

El problema con imaginarme a mí mismo haciendo algo que me gustaría hacer es que le doy más consideración a lo que imagino que a mi aplicación real actual requerida, y entonces me manipulo a mí mismo a ir tras ello, entonces realmente he establecido tal relación con mi imaginación de ‘oh, esto es lo que imagino, esto es lo que debo atender’, que de hecho entonces mi punto de partida es, en este caso, seguir a la mente y no hacer una puesta a tierra de qué estoy haciendo y hacerlo.

Solución:

En el momento y cuando me vea a mí mismo dándole más consideración al imaginarme a mí mismo haciendo algo que me gustaría hacer cuando estoy caminando mis tareas o trabajo, o estoy por empezar con una tarea o trabajo – me detengo y respiro. Me doy cuenta que lo relevante siempre va a ser lo que he establecido, ya que lo he establecido con el beneficio de desarrollo, de expansión, de estructura, de apoyo, de asistencia, de dirección, de corrección, así que definitivamente, el punto es poder alcanzar la imaginación a transformarla en una imagen, es decir, detenerme y volverla estática para simplemente revisar de qué trata la imaginación y hacer una puesta a tierra, siempre tener esta puesta a tierra, ya que de esta manera puedo tomar mi principio director en momentos en que la mente me muestra cosas para entonces realmente construir en ese momento si es requerido agregarlo o no a mis actividades en forma de aplicación práctica.

Me comprometo a mí mismo a traerme al respiro y hago una puesta a tierra, volviéndome consciente de mí cuerpo físico humano, mis sentidos, y detener la imaginación, congelándola y ver la naturaleza de la imaginación, una vez vista y darme cuenta que es irrelevante para mi aplicación o para considerarla realmente, sigo caminando mi aplicación o trabajo, si es relevante, la anoto para luego, al final del día, en mi momento de ajustes y revisión de horario, pueda hacer una evaluación de mi aplicación y establecer en qué parte de mi horario agregarla.

En el momento y cuando me vea a mí mismo manipulándome a mí mismo a seguir el hilo detrás de mi imaginación por creer que lo que imagino es a lo que debo atender, al imaginarme a mí mismo haciendo algo que me gustaría hacer, al estar caminando mis tareas o trabajo, o estoy por empezar con una tarea o trabajo – me detengo y respiro. Me doy cuenta que, ok, puedo establecer una puesta a tierra como plataforma de traerme de nuevo a mi aplicación aquí, a lo físico, y al volverme constante y consistente en mi aplicación de permanecer consciente de qué surge en mi mente, puedo congelar la imaginación y detenerme, también como apoyo físico puedo directamente seguir moviéndome en mi aplicación sin interrumpirme con la creencia de que debo prestar atención a mi imaginación, sino que el punto de importancia es la puesta a tierra primeramente.

Me comprometo a mí mismo a traerme al respiro antes de comenzar una aplicación de tarea o trabajo, hacer una puesta a tierra, y caminar considerando mi aplicación actual elegida como el punto de enfoque y relevancia, entonces cuando surge mi imaginación que no he constructivamente generado, me detengo, congelo la imaginación, veo la naturaleza de mi imaginación, y si es irrelevante a mi aplicación actual o a considerar como parte de mis tareas o trabajo, lo dejo ir respirando mientras sigo caminando mi aplicación actual.

En el momento y cuando me vea a mí mismo manipulándome a mí mismo a ir tras lo que me gustaría hacer, al imaginarme a mí mismo haciendo algo que me gustaría hacer, al estar caminando mis tareas o trabajo, o cuando estoy por empezar con una tarea o trabajo – me detengo y respiro. Me doy cuenta que aquello que me gustaría hacer, sea o no algo que haya establecido, no tiene sentido ni relevancia, ni siquiera razón de ser en un momento de aplicación o trabajo, ya que el punto de hecho reside en caminar la estructura organizativa que he establecido, y en vez de entrenar a mi mente a ese punto de apoyo y asistencia para ello, para usarla constructivamente, la he usado para distracción y desconsideración a mi sentido de responsabilidad, lo cual el punto llave aquí es comenzar a considerar consecuencias, a volverme consciente de las consecuencias – momento de recuperar y considerar el sentido de responsabilidad.

Me comprometo a mí mismo a traerme al respiro y congelar mi imaginación, viendo la naturaleza de mi imaginación, y entonces me permito y acepto ver consecuencias, si veo que no es relevante para mi aplicación actual elegida o para establecer como aplicación práctica, me detengo mientras sigo caminando mi aplicación, y si me manipulo a seguir viéndola, entonces me pregunto ‘qué consecuencias son mejor para todos? Cuáles consecuencias son las que me van a beneficiar realmente?’ haciéndome consciente de que si no camino mi estructura organizativa establecida, entonces realmente no estoy caminando qué es mejor para todos, así me llevo a empujarme a mí mismo a caminar la aplicación correctiva.

Recompensa:

De esta manera me vuelvo el principio director de qué acepto y permito moverse en mi mente y qué no acepto y permito moverse en mi mente, en relación a qué emerge que no he constructivamente generado, de manera que ahora puedo caminar mi aplicación sin abandonarla, sino que ahora recupero sentido de responsabilidad al ver consecuencias y camino responsabilidad de uno mismo, en donde cambio realmente cómo uso la mente de hecho a apoyo y asistencia para mi estructura organizativa establecida.

En el próximo post seguiré caminando la dimensión de imaginación de mi personaje preocupado por hacer algo.

Gracias!

domingo, 21 de abril de 2013

Día 143 – Imagina lo que te gustaría hacer cuando haces tareas...

Éste post es la continuación de:


|Dimensión de Imaginación:


||Me Imagino a mí mismo haciendo algo que me gustaría hacer.

Problema:

El problema con imaginarme a mí mismo haciendo algo que me gustaría hacer es que le doy más consideración lo que imagino que a mi aplicación real actual requerida, y entonces me manipulo a mí mismo a ir tras ello, entonces realmente he establecido tal relación con mi imaginación de ‘oh, esto es lo que imagino, esto es lo que debo atender’, que de hecho entonces mi punto de partida es, en este caso, seguir a la mente y no hacer una puesta a tierra de qué estoy haciendo y hacerlo.

Solución:

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo darle más consideración al imaginarme a mí mismo haciendo algo que me gustaría hacer cuando estoy caminando mis tareas o trabajo, o estoy por empezar con una tarea o trabajo, ya que así me doy tiempo de reaccionar a mi imaginación con deseo de hacer aquello que imagino me gustaría hacer y entonces al volver a mi tarea generaría toda una experiencia de ansiedad por hacer aquello que deseo en mi mente, y participaría más y más en mi mente aceptando y permitiendo el imaginarme a mí mismo haciendo algo que me gustaría hacer para volverme más y más ansioso por hacerlo, como imponiéndomelo con la ansiedad para abandonar mi aplicación o trabajo requerido, en donde recuerdo cuando iba a la primaria que me decidía por hacer las tareas, y luego imaginaba otras cosas que me gustaría hacer y abandonaba completamente mis responsabilidades.

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo manipularme a mí mismo a seguir el hilo detrás de mi imaginación por creer que lo que imagino es a lo que debo atender, al imaginarme a mí mismo haciendo algo que me gustaría hacer, al estar caminando mis tareas o trabajo, o estoy por empezar con una tarea o trabajo, ya que así no detengo mi participación en mi imaginación con el solo hecho de darme cuenta de la naturaleza o lo que me muestra la imaginación, sino que darme tiempo de poder reaccionar con deseo a mi imaginación para entonces tratar de manifestar lo que imagino, generando todo un punto de conflicto interno como ansiedad por hacerlo, para ir tras ello y abandonar mi aplicación.

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo manipularme a mí mismo a ir tras lo que me gustaría hacer, al imaginarme a mí mismo haciendo algo que me gustaría hacer, al estar caminando mis tareas o trabajo, o cuando estoy por empezar con una tarea o trabajo, ya que así puedo seguir el hilo en mi mente de lo que me gustaría hacer, convirtiendo a mi mente en un punto de distracción y creando de hecho en mi mente un punto de desconsideración hacia aquello que es requerido hacerse, y es decir, realmente estoy permitiendo y aceptando en mi mente tal relación de desconsideración por lo que es requerido y mi responsabilidad completamente para satisfacer mis deseos y escapar de la ansiedad, en donde recuerdo cuando iba a la primaria y me decidía por hacer las tareas, y luego de imaginar otras cosas que me gustaría hacer, en mi mente creaba un punto de desconsideración hacia mis tareas completamente cada vez que imaginaba algo que me gustaría hacer, como no importándome en lo absoluto mis responsabilidades, sino sólo satisfacer mis deseos.

En el próximo post seguiré caminando la dimensión de imaginación de mi personaje preocupado por hacer algo.

Gracias!

Día 142 – El yo ideal vs. el verdadero yo

Éste post es la continuación de:


En estos días he experimentado un gran enojo hacia mi entorno, hacia lo que normalmente tendría que lidiar, toda una batalla interna por qué es lo que voy a aceptar y permitir, es decir, ni siquiera veía qué estaba aceptando y permitiendo ya que había creado toda una personalidad de cambio, de algo que era de hecho seguir mi ideal y no realmente enfrentar las consecuencias manifestadas= mi mente.

La batalla SIEMPRE había sido entre lo que yo quería ser/mi ideal de cómo las cosas tendrían que ser, el conocimiento e información que me imponía seguir y lo que sería mis reacciones, mis pensamientos, mis memorias, mis creencias, la representación de mí mismo en la mente, y llegué a entender que imponerme a mí mismo quién ser en cada momento como tal personalidad idealista, ya no pude mantenerla, no pude sostenerla, todo se iba derrumbando, cada vez que quería ser como aquello que creo ser, reaccionaba con enojo hacia mi entorno, hacia los demás, y entonces todo un conflicto interno por ello, me sentí perdido, me sentí que estoy realmente jodido, me juzgué por no saber qué hacer, porque realmente ya no sabía cómo seguir.

La solución ha sido detener el ideal, detener el camino que creí estar, en el ‘nivel’ en el que estoy, ya que eso era de hecho el conflicto dentro de mí, mantener esta personalidad de que estoy viviendo o siendo ciertas palabras por ser de una manera que realmente no era yo, y hubo consecuencias, las cuales de hecho seguir en tal estado, en tal personalidad, en tal ideal, en tal creencia de quién soy fue el problema, acepté que no soy nada de eso, acepté la realidad, y volví a ver mi punto de partida en este proceso.

Llegué a darme cuenta que me motivé con el miedo a no existir, que si no caminaba este proceso, no tendría vida eterna, no podría seguir existiendo – este punto de partida de hecho había estado en mí desde que comencé el proceso en sí mismo, y que ignoré, y que al momento de volver a escribir saltó al instante porque ‘es que si no me cambio pronto, si no demuestro que cambié, todo acabará para mí!’ fue esta mi relación con mi mente, porque no le estaba mostrando a nadie, me estaba mostrando a mí mismo que ‘cambié’ y que ahora ‘soy diferente’ por cómo soy y por lo que hago… llegué a aceptar que estoy solo, que nadie me conoce… que no me conozco y ahora decidí llegar a conocerme, llegar a descubrirme a mí mismo.

Me di cuenta que al transformar mi punto de partida de miedo, a llegar a conocerme y descubrirme a mí mismo como la mente, mi aplicación la cambié a honestidad como uno mismo, es decir que ahora estaría respirando y caminando en lo físico viendo qué surge en mi mente de acuerdo al contexto en el que me encuentro, y me movería de acuerdo a quién realmente soy como la mente, entonces ya no estoy peleando por un ideal, en constante conflicto, estoy tomando decisiones en lo físico de acuerdo a qué es aceptable y permisible, viendo consecuencias, tomando el contexto real y dirigirlo, y al mismo tiempo volviéndome consciente de qué surge en mi mente, y ahora puedo darme cuenta de quién soy, qué corregir, qué dirigir, qué tengo que cambiar por mi propia relación con la mente y energía, haciendo un verdadero plano de la mente.

Así que, cambié mi punto de partida, cambié mi aplicación y enfoque, y ahora estoy caminando realmente mis compromisos correctivos al estar en el punto, probándolo por mí mismo si es efectivo.

En relación a mi aplicación correctiva sobre el personaje ‘preocupado por hacer algo’, sí, he comenzado a caminar mis compromisos correctivos empezando desde anoche – agregué más tareas y compromisos a caminar en mi agenda, y ahora estoy caminando el enfocarme en la aplicación actual, y está cool – es efectivo realmente lo que he establecido, y cuando es necesario voy al baño, me baño, limpio mis anteojos, hago algo que me piden los demás, desayuno, almuerzo, meriendo y ceno – tendré que ver también el punto de la comida y cuantas horas de acuerdo a lo que tome o coma, está genial esto! Estoy disfrutándolo mucho el dedicarme y ser honesto como uno mismo al caminar mis correcciones y el conocerme y descubrirme a mí mismo como la mente.

Ahora introduciré la dimensión de imaginación, porque la de pensamiento todavía estoy en proceso de identificar, lol.

|Dimensión de Imaginación:

||Me Imagino a mí mismo haciendo algo que me gustaría hacer.
||Me imagino a mí mismo haciendo algo que me falta hacer.
||Me Imagino a mí mismo haciendo algo que no hice.
||Me imagino a mí mismo haciendo la tarea o trabajo que sigue después de la que estoy haciendo.
||Imagino las consecuencias de qué pasa si no lo hago ahora a lo me que falta hacer, como viendo qué pasa si no participo.

Ok, en el próximo post caminaré la dimensión de imaginación de mi personaje preocupado por hacer algo.

Gracias!

viernes, 19 de abril de 2013

Día 141 – Por qué no hacer lo que establecí hacer?

Éste post es la continuación de:

|Dimensión de Miedo:

 
||Miedo a perder la oportunidad de hacer algo.

Problema:

El problema con el miedo a perder la oportunidad de hacer algo es que comienzo a deliberadamente ver qué cosas puedo hacer en el momento cuando estoy en plena aplicación o trabajo o cuando estoy por hacerlo, y entonces me manipulo a mí mismo a seguir el hilo del pensamiento que surge.

Solución:

Me perdono a mí mismo el haberme aceptado y permitido a mí mismo temer perder la oportunidad de hacer algo, al iniciar o estar aplicándome o trabajando, ya que así puedo acumular energía dentro del punto de ¿qué es aquello que estoy perdiéndome de hacer? para deliberadamente generar pensamientos y memorias en la búsqueda por hacer otra cosa que no sea mi aplicación o trabajo de hecho, para manipularme a mí mismo a seguir el hilo del pensamiento que surge, en donde recuerdo cuando estaba por ponerme a hacer la tarea y entonces comencé a deliberadamente ver qué otras cosas puedo hacer, en donde me puse a limpiar mi casa, con tal de no hacer lo que me había propuesto hacer.

En el momento y cuando me vea a mí mismo temiendo perder la oportunidad de hacer algo al iniciar o estar aplicándome o trabajando – me detengo y respiro. Me doy cuenta que puedo establecer un momento del día en el que puedo específicamente establecer y marcar qué es aquello que puedo hacer en el día, un momento de organización para entonces asegurarme de que lo voy a poder hacer en el día, considerando usar la mente constructivamente para referenciar el tiempo que me puedo tomar para hacer una aplicación o trabajo, y así caminar mi día de una manera efectiva, sin interrumpir mi aplicación o trabajo, sino dándome más enfoque en ello porque ahora no tengo que preocuparme por otra cosa si ya le he dado el momento para hacerlo.

Me comprometo a mí mismo a traerme al respiro y distribuir la energía a todo mi cuerpo y me vuelvo consciente de mi cuerpo físico humano, mis sentidos y simplemente comienzo a dirigirme en el momento a mi aplicación o trabajo establecido, viviendo mis palabras, viviendo lo acordado conmigo mismo y si todavía no lo estoy haciendo, me preparo física y mentalmente para hacerlo, es decir me estabilizo y me enfoco en aquello que es requerido dirigir en el momento de mi aplicación o tarea, y si es requerido marcar el tiempo final, uso las alarmas de mi celular para ello.

Me comprometo a mí mismo a, al finalizar todas mis actividades del día, revisar mi calendario, mi agenda, mis actividades y ver qué es requerido agregar o ajustar, referenciando con cómo es que he caminado mi día y qué es aquello que podría hacer, siendo éste el momento de evaluar y reajustar mi aplicación y trabajo diario.

Recompensa:

De esta manera no hay razón de que exista el miedo a perder la oportunidad de hacer algo, porque lo transformo a aplicarme o trabajar en el momento, confiando en mí mismo de que he establecido qué es aquello que voy a caminar en mi día, enfocándome en qué es requerido hacerse, y a la vez, tengo el momento de evaluación, ajustes y modificación de mis tareas diarias que es al final del día, lo cual hace más efectivo mi participación y actividad.

En el próximo post caminaré la dimensión de pensamiento de mi personaje preocupado por hacer algo.

Gracias!