jueves, 28 de junio de 2012

Día 43 – Deseo de Ser Entendido para Tener Sexo


Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo buscar maneras de relacionarme con una persona a la cual le he conectado pensamientos, sentimientos e ideas para terminar teniendo sexo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo al poder tener una comunicación con tal persona y ver que dentro de la comunicación puntos donde percibo, creo y pienso que estoy siendo tomado en consideración –alimentando a mi ego para así llegar a la conclusión de que la persona piensa y siente igual que yo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo crear deseos a través de chatear y así dejar que mi deseo de tener sexo me dirija en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir, pensar y creer que los demás podrían sentir lo que yo siento en especificidad cuando esto sólo lo estoy sintiendo yo mismo a través de mis propias experiencias internas con mis pensamientos e ideas en separación de uno mismo.

-Siento deseos de tener sexo y elegí a una persona a la cual le atribuí mi deseo en pensamientos y cargas energéticas – me siento cargado en este momento y con ganas de desenvolverme con ella.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo al sentir un deseo de tener sexo, que este deseo me dirija y cree todo un escenario para luego lento pero seguro llegar a concretar mi deseo por medio de mi participación, ya que si yo me muevo en y como el deseo y lo sigo permitiendo, permanezco con la decisión de tener sexo y moverme a través de este deseo, crearé toda una situación en la cual pueda concretarlo –creando consecuencias al decirle a la otra lo que siento y la otra persona definir lo que siento de acuerdo a lo que siente y así cuando mi sentimiento se acabe y la de esta otra persona no, o viceversa, se cree un conflicto interno emocional que terminará en el despecho o rencor – ya que no fue basado en un principio o en total despeje, honestidad como uno mismo sino en una experiencia momentánea que se alimentará de acuerdo al deseo de sexo y diferentes actitudes, comportamientos y palabras que creen la experiencia de felicidad y otras experiencias hasta explotarlo en su máxima expresión –cayendo en los patrones permitidos y aceptados de ‘amor’ o ‘relaciones’ basados en energía.

-Arreglo una situación para juntarnos con esta persona y ahora tendré que ‘esconder’ mis deseos –que es lo que he hecho en mi tiempo en relaciones.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo al comunicarme y crear un escenario para juntarnos con otra persona, al llegar el momento ocultarme en mi mente secreta mis deseos y sentimientos para así esperar a que la otra persona me muestre/demuestre lo que siente para así yo demostrarlo también, condicionándome a mis pensamientos y patrones permitidos y aceptados en las relaciones y el miedo a ser rechazado.

-Miedo a que no sienta lo mismo y ser rechazado por no cumplir con mis deseos y expectaciones de ‘ella también piensa lo mismo’.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer el rechazo de una invitación.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar el miedo a ser rechazado con el miedo en sí mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer mi propio miedo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo tener la esperanza de que la otra persona perciba y sienta lo mismo que yo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar ser rechazado con una experiencia y valor negativo en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar ser aceptado con una experiencia y valor positivo en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer ser decepcionado al depositar mis esperanzas en el otr@, cuando depositar esperanza y confianza en otr@ es deshonesto conmigo mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo esperar algo de los demás en vez de moverme y hacerlo por mí mismo como un ejemplo de quien soy como la vida, quien soy para mí mismo –levantándome en y como para lo que es mejor para toda la vida en honestidad como uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer no llegar a donde quiero.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar el temor a no llegar a donde quiero con el miedo en sí mismo.
Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo el temor a mi propio miedo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo juzgarme al percibir y creer que no me aceptaron la invitación o lo que sea, al no percibir y sentir lo mismo que yo la otra persona.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo juzgarme a mí mismo al percibir, creer y pensar que la otra persona no estaba de acuerdo conmigo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo manipular a los demás a través de sentimientos y emociones para mi último fin que es tener sexo, una relación o alguien con quien experimentarme, siendo la otra persona responsable de lo que permite y acepta dentro de sí mismo experimentarse dentro de las palabras que utilizo para seguir alimentando su ilusión de experiencias energéticas dentro de sí mismo –siendo también yo responsable al aceptar y permitir dentro de mí mismo engañar a la otra persona de que siento lo mismo o también engañarme a mí mismo al generar las experiencias mismas que la otra persona tiene, como conocimiento e información dentro de mí mismo que experimento.


-Percibiendo y creyendo que lo que quiero es una locura y que no será aceptada porque tendrá excusas –percibir que hace excusas

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir, pensar y creer que lo que yo diga para llegar a un acuerdo sea una locura, juzgándome a mí mismo antes de hacer la pregunta como loco.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo sabotearme a mí mismo por medio de pensamientos y emociones juzgándome a mí mismo para no tener que enfrentar el punto donde mi ‘acuerdo’ está basado en mi ‘deseo’.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo ocultar el deseo por medio de crear un pensamiento y percepción de que mi deseo y el momento en el que quiero que mi deseo se manifieste es una locura y así generar otro pensamiento donde mi deseo sea tapado o ya no exista porque me he permitido y aceptado a mí mismo juzgarme como loco el seguir o decir mis deseos o sentimientos.

CAMINARÉ ESTO DESDE EL COMIENZO DE MIS RELACIONES EN DETALLE.

miércoles, 27 de junio de 2012

Día 42 – Confianza en la Mente


Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado a mí mismo moldear un patrón dentro de mí mente de como debería de hacer el perdón a uno mismo y creer, percibir y pensar que dentro de mí mente los puntos que estoy encontrando son interesantes, cuando estos pensamientos que estoy generando de perdón a uno mismo no están siendo parte de ningún punto más que lo que la mente quiere que vea para que yo cree un punto de confianza dentro de mí mente para que pueda confiar en que ‘soy capaz de ver las experiencias y no caer en ellas’ cuando eso no es así.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado a mí mismo crear confianza hacia mi mente cuando estoy participando en ella, por curiosidad del perdón a uno mismo que puedo encontrar allí para luego ‘hacerlo en voz alta’ – cuando lo que hago y digo en realidad es ‘mente, dirígeme hacia allí’.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado a mí mismo percibir y creer que mis pensamientos y la manera en que participo en mi mente sobre ‘correcciones y perdones y otros puntos’ relacionados a un cambio son válidos diciendo ‘wow, mente has cambiado y ahora mi mente está apoyándome para cambiar’ como cuando confías en que alguien cambia sólo por el hecho de que su forma de actuar cambia, pero las resonancias, las experiencias y el punto de partida dentro no lo es – sigue siendo otro punto de ego y búsqueda de ‘confía en que te dirigiré bien’ cuando se trata de confiar en que eso es lo que tengo que corregir y dirigirme como el respiro de vida hacia la nada – ese es el punto.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado a mí mismo percibir y creer que una realización está dentro de mí mente, dentro de una experiencia energética, dentro de un pensamiento – cuando la realización llega dentro de lo físico, sin experiencias sino caminando mis escritos, mis perdones hacia el punto de ver que en lo físico cambié y llegué a comprenderlo, que es lo mejor para todos dentro de mi decisión en igualdad.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado a mí mismo percibir y creer que hacer sonidos, expresión en base a sonidos y pensamientos y experiencias son mi propia expresión cuando esa expresión es por la confianza que le he dado a mi mente al ver que ella ha estado “cooperando” conmigo y entonces no vivo en y como el respiro sino que gasto mi tiempo y respiros en la mente y creando energía.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado a mí mismo percibir y creer que cuando hacía o me expresaba como la mente en hacer ruidos o movimientos era mi expresión, cuando lo hacía sólo para demostrar que ‘estoy en control’ y ‘estoy expresándome’ y ‘no tengo miedo’ cuando en realidad todos esos puntos son de mi mente y ego en separación de mí mismo al yo confiar en mi mente y no en mi respiro aquí en y como mi cuerpo físico.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir, creer y pensar que mi verdadera expresión la encontraría en mi mente y que mi mente me daría el punto para que me exprese como uno mismo cuando estoy basando mi expresión en algo en separación de uno mismo y en ego.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo querer que los demás vean que no tengo miedo y que he enfrentado puntos al mostrarme ‘expresivo’ y percibir y creer que me estoy dirigiendo a mí mismo cuando es un control mental y no dirección como uno mismo en y como el respiro, en y como honestidad como uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir y creer que la mente me llevaría y me dirigiría de manera que pueda ser de apoyo, cuando el apoyo que estoy recibiendo es para mi ego, para seguir en loops, para no vivir una verdadera solución en sentido común en base a la honestidad como uno mismo y unicidad e igualdad.

Me comprometo a mí mismo a parar y dejar de confiar en mi mente, respiro y me doy cuenta que quien soy existe en y como el respiro y mi mente es para darme cuenta de como me he separado a mí mismo y no me he unificado para buscar soluciones y lo que es mejor para todos que es el punto en el cual me unifico a mí mismo en y como la vida.

Me comprometo a mí mismo a parar la expresión basada en sonidos mentales hechos físicos provenientes de mi contención de conocimiento e información.

Me comprometo a mí mismo a investigar todos los sonidos y expresiones basados inconscientemente en memorias para liberarme de ellas con el perdón a uno mismo.

martes, 26 de junio de 2012

Día 41 – El Corrector


Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo estar constante y continuamente revisando mi mente, hablando conmigo, creando conversaciones buscando puntos a corregir cuando yo mismo estoy generando ese punto que tengo que corregir instantáneamente al generar los pensamientos en ese momento – cuando ‘busco’.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo NO darme cuenta de que estuve creando falsas realizaciones al no tener la cadena de experiencias y pensamientos específicos que vienen al ‘enfrentar’ un punto al cual me he energizado – lo cual cuando ‘busco’ no hay, sólo lo estoy generando y jodiendo conmigo a falsas realizaciones.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo buscar que corregir al tener una conversación conmigo, pero en esta conversación estoy ‘buscando algo’ y no ‘expresando lo que hay aquí’ como los pensamientos, los sentimientos, las creencias, las ideas, las emociones, los patrones, las construcciones – entonces me creo un velo al cual yo digo ‘me he dado cuenta de esto’ pero sin caminarlo paso a paso, sin vivirlo de hecho, sin enfrentar lo que hay aquí como mi propio loop.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir y creer que al conversar conmigo y estar en la búsqueda contante de alcanzar algo ‘elevarme’ como el ego, estoy separándome de mí mismo aquí, en cada respiro al participar más en mi mente de hecho.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo pensar que mi mente me llevará al punto, entonces no tengo que ver mi experiencia y todo el contenido ya que me he dejado influenciar por mis pensamientos e ideas sobre mí mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir y creer que ‘estoy realizado algo’ al estar buscando que corregir y en eso ‘creo la experiencia de estoy hecho’ – cuando caminar no depende de una energía y no finaliza en una experiencia en absoluto.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo querer y buscar corregir a los demás dentro del punto de partida de ‘soy superior’ y tu ‘eres inferior’ porque yo ‘me doy cuenta de esto’ y ‘te estoy enseñando’ porque ‘vos no estás dándote cuenta’.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo hablar y explicar a los demás mi realización sólo para querer mostrarme como superior a, entonces no estoy apoyando y asistiendo como uno e igual y soy sólo una creación de mi propia percepción e idea de mí mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo querer convencer a las personas de lo que digo, y no orientar a las personas desde la capa en la cual se encuentran del engaño – ya que si voy al final de todas las capas, no será entendida con totalidad ya que no estoy dirigiendo desde el punto en el que se encuentran para llevarlo hasta el final.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo entablar una comunicación con una persona reaccionante y yo al reaccionar estoy dentro del juego, creando así la personalidad de superioridad e inferioridad – soy capaz de terminar el ciclo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo darle mayor valor a mis palabras al estar dentro de una comunicación y de ese modo cerrándome a mis propias palabras sin dar una orientación al punto en el cual se está conversando o se me está comunicando.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo no darme la oportunidad de caminarme a mí mismo como el proceso, el cambio que es uno mismo y que dentro de este proceso darme cuenta de que estoy dándome nacimiento desde lo físico y entonces respirar es vital para estar aquí y desde aquí yo realizo que tejeré los hilos para terminar con las construcciones, en vez de que mi ego esté buscando por ellas para ‘terminar más rápido’ el proceso.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo querer apurarme en este proceso, terminar lo más rápido posible y llegar hacia algún lado, cuando no tengo que irme hacia ningún lado.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir, creer y pensar que ‘tengo que alcanzar algo’ cuando lo que quiero alcanzar es a ‘mi propio ego’.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo pensar, percibir y creer que ‘tengo que corregirme, tengo que perdonarme, tengo que hacer esto ya, busco, busco, busco’.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo competir para llegar hasta la meta, cuando de hecho yo soy el camino y lo único que estoy logrando es separarme de mí mismo al competir conmigo mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo acumular dentro de mí mismo definiciones de mí mismo y temer perderlas.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer perder la definición de mí mismo como ‘realizaciones’, cuando esto es ego en su totalidad.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo definirme a mí mismo de acuerdo al camino que caminé y no como el principio del camino que caminé –que es mi apoyo y asistencia incondicional y punto de partida para entender el camino.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo que mi proceso dependa del exterior y separarme del proceso que soy yo, que he tomado la decisión de levantarme en y como la honestidad como uno mismo con el principio de unicidad e igualdad de vida como lo que es mejor para todos, hasta que esto sea un hecho.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo condicionarme a lo que las demás personas podrían pensar, creer, decir, proponer, inculcarme, controlar, emocionar, sentir ya que es un regalo para mí para darme cuenta de lo que existe afuera y dentro para que yo mismo sea uno e igual dentro y afuera al dirigirme en y como la honestidad como uno mismo, expresándome como el perdón a uno mismo y aplicación correctiva hasta que esto sea un hecho, yo de pie en igualdad, para lo que es mejor para toda la vida en todos los sentidos.

Me doy el regalo de la vida, respirando. Me doy el regalo de parar el pasado/el loop perdonando. Me doy el regalo de la corrección aplicándome como uno mismo. Me doy el regalo de cambiar, siendo mi propio proceso de cambio. Me doy el regalo de confiar en mí mismo, dirigiéndome como uno mismo, asistiéndome y apoyándome. Me doy el regalo de la humildad, reconociéndome como uno e igual a lo que existe y que todo cuanto existe soy yo. Me doy el regalo de disfrutar, porque estoy volviendo a la vida y es el mejor regalo que uno puede darse a sí mismo.

Me comprometo a caminar los 4 conteos de respiro práctico los próximos 21 días.

Me comprometo a disfrutarme a mí mismo como el proceso de vuelta a la vida.

Me comprometo a des-cubrir mi ego y las capas de engaño que he creado utilizando la escritura, el perdón a uno mismo y aplicación correctiva.

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lunes, 25 de junio de 2012

Día 40 - Proyección y ego: falsas realizaciones

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo estar pensando en que tengo que hacer en el día como proyecciones futuras en vez de estar actuando y moviéndome para empezar a hacer las cosas que tengo que hacer – generando así la experiencia de cansancio y el mecanismo de defensa de ‘divagar’.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo participar dentro de mí mente en pensamientos, proyecciones de lo que tengo que hacer en el día sin haberlo hecho.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo gastar mi tiempo pensando en que tengo que hacer, acumulando todo dentro de mí mente lo que tengo que hacer y darle un valor y el tiempo en el que lo haré en vez de hacerlo y verlo por mí mismo cuanto tiempo me tomé y si sigo teniendo tiempo, seguir con la siguiente tarea y así sucesivamente.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer perder la comprensión de mi proceso y como llegué a esa comprensión.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer perder mis realizaciones.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar el miedo a perder mis realizaciones con el miedo en sí mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer mi propio miedo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo no darme cuenta de que si ‘pierdo u olvido mi realización’, entonces no fue una realización en su totalidad como uno mismo, sino una hipótesis o conclusiones o atajos para ello.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo proyectar y separar mi proceso en pensamientos, ideas y creencias sobre como llegué a donde estoy y como llegaré al siguiente paso, en vez de caminarlo paso a paso como uno mismo a través de mis realizaciones con la escritura y perdón a uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo buscar atajos como hipótesis o conclusiones de uno mismo en y como un estado de superioridad resonantemente/energéticamente donde me siento/experimento uno mismo ser más/superior a la mente/aplicación/caminar el proceso práctico.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo alzar la voz y alterarme cuando alguien está en contra o ‘poniendo en frente’ su punto de vista, yo respondiendo energéticamente.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo querer arreglar la situación de los demás y no vivir mi propio proceso, enfocarme en mí mismo y corregirme a mí mismo primero.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer ser corregido.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar el miedo a ser corregido con la vergüenza y el miedo en sí mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer mi propio miedo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo avergonzarme por tener errores y no querer cambiar por no querer asumirlos, corregirlos y dirigirme eficazmente.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo la declaración ‘soy perfecto tal cual soy’ cuando de hecho, esto es deshonesto en su totalidad, ya que estoy validando mi propia personalidad que he creado y definido como ‘individual’.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir, creer y pensar que soy único y que no necesitaría corrección, sino los otros en mi entorno.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo estar en una posición de superior en mi realidad, en mi mundo – denigrando a las demás personas a ser simplemente producto de mis propias ideas y creencias.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo NO darme cuenta de que este camino se camina como uno como iguales hasta que esté hecho, hasta que vivamos unicidad e igualdad en honestidad como uno mismo como lo que es mejor para todos en todos los sentidos.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo NO darme cuenta que en el momento que tomo una decisión, desde ese momento en adelante vivo esa decisión porque ya lo decidí.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo expresarme desde el punto de partida de ‘lo que no voy a hacer’ en vez de ‘lo que voy a hacer’ como uno mismo, tomar responsabilidad, vivir el compromiso de escribirme y compartir mi aplicación así como el compromiso conmigo mismo a vivir ese cambio.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir, creer y pensar que ‘caer’ existe cuando la idea de caer sólo existe como una personalidad donde ‘me elevo’ a mí mismo como el ego.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo que mi punto de partida de caminar el cambio no sea yo mismo.

No permito y acepto más separarme del cambio y me comprometo a definir el cambio cuando esté en condiciones para hacerlo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir, creer y pensar que podría ‘caer’ en el proceso ya que caer significa una personalidad y entonces no viví como la corrección, no viví como el principio director – cuando cometa errores, paro, no me dejo llevar por juicios que me presenta la mente y aplico el perdón a uno mismo y lo corrijo.

Me perdono a mí  mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo crear una personalidad en base al proceso, generando una idea y creencia de como debería de caminarlo y proyectarme como eso y vivir eso y desde allí ‘percibir y creer’ que caigo, que fallé, que no mantuve mi imagen cuando todo fueron creaciones mentales a las cuales me he definido.

Me perdono a mi mismo por haber aceptado y permitido crear y participar en una personalidad de 'entendimiento del proceso' = ego, sin darme cuenta que el entendimiento del proceso es en realidad caminar mi punto de partida, para caminar desde un compromiso como lo que es mejor para todo y todos.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo no realizar que una proyección de conocimiento e información dada sin una aplicación real y práctica para que yo viva y aplique como uno mismo, sigue siendo parte de una creación dentro de mi propio ego que la he 'tomado como cierta' y 'moldeado a mi gusto' sin vivirlo paso a paso, caminado paso a paso.

Me perdono a mi mismo por haber aceptado y permitido comunicar-me de acuerdo al 'entendimiento de mi proceso' como información y conocimiento, en separación de uno mismo, cuando en realidad no estoy aplicándome/viviendo como tal entendimiento como uno mismo, sino que caminándolo desde el ego, y por ende, elevando-me para luego caer.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo querer buscar constante y continuamente ideas, creencias, percepciones, conclusiones, atajos e hipótesis dentro de mi mente sin caminar mis escritos y perdones a uno mismo como la realización de uno mismo paso a paso en mi realidad.

Me perdono a mi mismo por haber aceptado y permitido creer/percibir que al darme cuenta de algún punto estoy aparentemente 'superando' ese punto, sin darme cuenta de que en realidad al buscar 'atajos' estoy separándome del punto a caminar = abdicando mi responsabilidad.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo al recibir perspectivas del proceso y puntos relevantes como realizaciones y comprensiones, quedarme con esas palabras en vez de caminar mi propio proceso para llegar a mi propia realización y comprensión en mi realidad física y en uno mismo.

En el momento y cuando me veo buscando 'atajos' a través de realizar realizaciones por realizaciones que aun no he caminado - me detengo y respiro. Entiendo que ello significa separación de quien realmente soy y es, de hecho, caminar a través del ego, para 'superar' - aparentemente - algún punto que debe ser caminado como uno mismo.

Me doy cuenta de que caminar el proceso, es caminarme a mí mismo, caminar el proceso de cambio es caminarme a mí mismo como el cambio.

Me perdono a mi mismo por no haber aceptado y permitido darme cuenta de que caminar el proceso como uno mismo es de hecho expresión de y como uno mismo, y por ende, independiente de cuan 'interesante' perciba/crea la percepción de alguien mas, sigo caminando como uno mismo, porque de lo contrario, estaría separándome de mi proceso = caminar el ego.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo tomar las realizaciones de otros y comprensiones apropiándomelas para no tener que caminar mi propio entendimiento, entonces mi proceso estaría 'hecho', ya que este proceso se trata de comprender y darme cuenta paso a paso, realización por realización para darme cuenta que es lo que es mejor para todos, entonces 'mi comprensión' es sólo ego.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo NO tener en claro de que se trata este proceso.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo NO darme cuenta de que mi punto de cambio es mi comprensión, la forma en que veo y como me muevo en este mundo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo pensar, percibir y creer que no sé de que se trata este proceso cuando es comprender y darme cuenta que es lo mejor para todos y que esto existe en y como la honestidad como uno mismo al yo vivir lo que es mejor para todos en consideración de toda la vida – entonces me aplico y vivo como el proceso de cambio.

Me perdono a mi mismo por no haber aceptado y permitido ver/darme cuenta/entender que este proceso es caminarme a mi mismo como un proceso, para establecerme en honestidad como uno mismo punto por punto, a través del perdón a uno mismo y la aplicación correctiva como uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo NO darme cuenta que no me he considerado como vida ya que me he permitido y aceptado a mí mismo abusar de mí mismo por energía/experiencias - me doy cuenta de que la vida a considerar y a liberar de la conciencia es a mí mismo, siendo el punto de partida la honestidad como uno mismo para traer ese cambio en consideración de toda la vida comenzando a devolverme a mí mismo como la vida.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo NO darme cuenta que soy un proceso de expansión en donde comienzo a aplicarme para comenzar a liberarme de mis propias limitaciones como conciencia hasta llegar a considerar a toda la vida.

Me perdono a mi mismo por haber aceptado y permitido darme la búsqueda de 'atajos' como adicción a la realización mental y no como uno mismo, sin considerarme a mi mismo como uno como igual como quien realmente soy como vida, como la palabra viva, sino que creando una personalidad que se ajuste a tal realización, sin caminar el punto como uno mismo, en honestidad con y como uno mismo, participando en juegos de la conciencia - ego/personalidades/energía/mente - como ciclos de levantarse/caer.

Me comprometo a mi mismo a caminar una realización a la vez, para así asegurar que en realidad estoy caminando el proceso como uno mismo. Lento, pero seguro.

Me comprometo a estar abierto a las revisiones de mis compañeros/procesos.

Me comprometo a aplicar el perdón a uno mismo para desarrollar honestidad como uno mismo, así me aseguro de que uno mismo esta dirigiendo los momentos y no el ego.

Me comprometo a no buscar atajos en caminar mi proceso actual.

Me comprometo a caminar mis realizaciones paso a paso abriendo las ‘ventanas de oportunidad’ con el perdón a uno mismo.

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sábado, 23 de junio de 2012

Día 39 – La Decisión


Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer hacer una decisión.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar el temor a hacer una decisión con el miedo en sí mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo el temor a mi propio miedo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo tomar mis decisiones en base a conocimiento e información en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo no darme cuenta que una decisión tomada es una decisión que camino como uno mismo en todo momento ya que la decisión está tomada.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer mostrar quien soy por temor a ser abusado.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar el miedo a mostrar quien soy y el temor a ser abusado con el miedo en sí mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo el temor a mi propio miedo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo tomar una decisión en dudas, temiendo las consecuencias de la decisión que tome cuando de hecho estoy siendo deshonesto conmigo mismo al caer en el miedo de mi ego de no llegar a concretar y haber perjudicado mi interés personal.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo tomar una decisión sin antes levantarme como la decisión, haber visto todas las dimensiones del momento, aplicar el perdón, corregir y caminarlo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo estar en constante miedo de no saber a donde estaba yendo o a donde me llevaría mi decisión de caminar en sentido común, honestidad como uno mismo e igualdad al no ver un resultado positivo o negativo como lo esperaba y pensar “¿estaré llegando a donde quiero?” cuando estar especulando y deseando ir hacia algún lado es deshonesto conmigo mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo estar pendiente del resultado de mis propias decisiones para sacar provecho de ello, en vez de estar aquí como la decisión de lo que es mejor para todos en honestidad como uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer no llegar a donde quiero cuando hablo en total honestidad como uno mismo, esto es deshonesto conmigo mismo el estar pensando y buscando llegar a un punto y juzgarme por no haber llegado a ello.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo juzgarme a mí mismo al no llegar a las especulaciones de mis propias decisiones, cuando de hecho, mi punto de partida ya estaba marcado con un final alternativo a la decisión de levantarme como honestidad como uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo estar buscando alternativas de mi propia decisión al haber creado en mi mente el resultado que me llevaría hablar tan específico y recto.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer hablar específico y recto.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar el temor hablar específico y recto con el miedo en sí mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo el temor a mi propio miedo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir, pensar y creer que la transformación es sólo afuera en vez de darme cuenta que la transformación llega tanto adentro como afuera –pensamiento, palabra y obra.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo no levantarme como la disciplina de mis decisiones, como la disciplina como uno mismo, ya que si me levanto como la duda y en separación de uno mismo voy a estar buscando por energía y me joderé a mí mismo porque yo sé que ingresar a la energía es jodido en sí mismo y levantarme aquí estable es la solución para la realización de quien soy PERMANECE.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo ser ansioso a que mis decisiones tomen el rumbo que yo quiero y desesperar al punto de caer en mi propia decisión y disciplina por un poco de energía/miedo y satisfacción.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo el miedo al futuro.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar el miedo al futuro con el miedo en sí mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo el temor a mi propio miedo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo NO darme cuenta de que estoy existiendo como el miedo a la muerte de mí mismo como la mente, generando así puntos de petrificación dentro de mí mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer enfrentar la ansiedad.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo petrificarme y no actuar por tener ansiedad.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo quedarme quieto, no moverme, generar un chat mental y movimientos físicos de miedo creando todo un velo para no actuar.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar la ansiedad con la idea de ‘debo parar’ en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo dejarme dirigir por la ansiedad en el momento para no actuar debido al miedo al futuro que creé y diferentes miedos para no enfrentarme en ese momento.

Me comprometo a mediante la escritura, el perdón a uno mismo y aplicación correctiva liberarme de todos mis pensamientos, sentimientos y emociones que no me apoyan para levantarme como la decisión de lo que es mejor para todos, como apoyo y asistencia como uno e igual.

Me comprometo a caminar mis decisiones en base a la unicidad e igualdad y sentido común.

Me comprometo a vaciar mi contenedor de información y conocimiento en separación de uno mismo e imaginación para no hablar dentro del contexto de algo que no he corregido, vivido o aplicado para no crear especulaciones y engaños.

Me comprometo a caminar y pasar por la ansiedad para levantarme dentro de y como uno mismo mediante el apoyo y asistencia de mi propia escritura, perdón a uno mismo y aplicación correctiva.

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viernes, 22 de junio de 2012

Día 38 – Perdiéndome en la comunicación

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo resistirme a hacer el perdón a uno mismo al manifestar mi propia personalidad convencional de conversar, de ayudar, de querer apoyar y asistir a los demás cuando de hecho estos no quieren apoyarse y asistirse a sí mismos.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo querer apoyar y asistir a los demás cuando ellos no tienen la decisión y determinación de hacerlo por ellos mismos y por lo tanto todo apoyo y asistencia hacia los demás es inútil si ellos no están dispuestos a ver el punto por ellos mismos.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo actuar como la ‘voluntad’ y ‘determinación’ de los demás en separación de uno mismo, al yo hacer las cosas y aplicarlas y vivirlas por los demás sin que estos tomen responsabilidad por ellos mismos por sus propias decisiones y responsabilidades.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir y creer que podría joder con los demás a mi gusto creyendo que yo no podría joderme a mí mismo de esa manera ya que yo tengo el perdón y la estabilidad del respiro para no caer, cuando de hecho eso es deshonestidad y a través de esa deshonestidad conmigo mismo estuve cargándome de ira y enojo con los demás que es un reflejo hacia mí mismo con lo que permití y acepté en los demás como en mí mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer perder quien soy al entrar en una conversación donde no podría mostrarles a los demás quien soy – ya que caí en un punto de especulación y expectación donde comienzo a dar visión mediante la imaginación a puntos que no he trabajado pero que sin embargo las contestaría porque no hay ‘nada que yo no sepa de mí mismo’.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo confiar en mi imaginación y percibir y creer que con ésta yo podría dar una visión de los puntos que ‘enfrentaría’ o ‘viviría’ tales como una relación cuando no lo he establecido –sigo manteniendo el patrón de mi acumulación de acciones de mis relaciones anteriores, por lo tanto es algo que debo corregir mi punto de partida y patrones.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo pensar, percibir y creer que no hay algo que no sepa de mí mismo, estableciendo una comunicación de sabotaje hacia mí mismo y la otra persona al comenzar a dar expectativas sin un claro ejemplo de lo que está aquí y hablar desde ese punto, de lo que está aquí.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo tomar la responsabilidad de los demás en separación de uno mismo, al querer arreglar la mente de los demás como un estado hipnótico o hipnotizar cuando esto no apoya ni asiste a los demás, sólo alimenta a mi propio ego de querer salvar a los demás de hecho.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir y creer que todas las relaciones que tengo, yo podría arreglar sus vidas, en esto me perdono por haberme permitido y aceptado a mí mismo poner y dar valor a las personas con que me relaciono al punto de no tomarlas como uno e igual a mí, accediendo a la confianza en separación de uno mismo para mis propósitos deshonestos.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo participar en una conversación dando mi confianza hacia la otra persona al compartirle mis opiniones de manera que estas opiniones sólo es parte de un ego, en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo depositar mi confianza hacia mis opiniones, donde estas opiniones están separando a los demás en el contexto de exponerme de manera emocional y sentimental o potenciarlo en la otra persona en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo NO darme cuenta que al proyectarme en mi mente estoy participando y dando cuerda a mi conciencia en donde estoy ‘viendo’ desde el punto de partida de una carga energética en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer enfrentar las situaciones a las cuales me he comprometido por el temor a fallar.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer fallar.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar el miedo a fallar con el miedo en sí mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo temer mi propio miedo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir y creer que existe el ‘fallo’, de manera de que estoy juzgando de acuerdo a una condición que me he impuesto en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo imponerme por ejemplo el miedo, y en esta imposición, estoy abriendo paso al ‘fallo’ o la ‘caída’ a través de sentimientos, pensamientos y emociones en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo comunicarme con apodos en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo dar apodos a los demás desde el punto de partida de sentimientos y emociones en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo crear separación al dar un valor energético a los apodos, participando en mi mente secreta con experiencias y valores negativos hacia los apodos que he permitido y aceptado tener sin cuestionarlos, sin pararlos y decir ‘hasta aquí no más apodos energéticos’.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo dar apodos y darme un apodo con un valor, una idea, una creencia que no apoya a la vida.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir y creer que los apodos son para crear confianza y dentro de eso, crear el enojo al percibir y creer que están utilizando el apodo y la forma de hablar para mostrar ‘confianza’ hacia mí, percibiendo y creyendo que lo hacen para su interés propio, en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar apodos con una carga energética negativa de odio, furia, engaño y celos y una carga energética positiva de confianza en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo enojarme cuando alguien me pide que haga algo para él/ella percibiendo, pensando y creyendo que me están gastando el tiempo cuando de hecho esa percepción la he creado en separación de uno mismo ya que, yo mismo he estado gastando mi tiempo en estar sentado dando vueltas y cuando alguien toma algo de ese tiempo, yo abdico la responsabilidad hacia algo exterior a mí – ya que, de hecho yo me he ofrecido a ayudar.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo juzgar a la otra persona cuando ésta me pide mi apoyo y asistencia para algo específico y yo creando dentro de mí mente, molestias, pensamientos, en separación de uno mismo.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo percibir y creer que alguien está molestándome cuando ‘estoy ocupado’, cuando ‘he ocupado’ mi mente en cargas energéticas a las cuales estoy reaccionando o cargando en mi mente cuando digo ‘estoy ocupado’.

Me perdono a mí mismo que me he aceptado y permitido a mí mismo conectar ‘estoy ocupado’ con abdicar la responsabilidad que tengo como uno e igual para ayudar a los demás cuando necesitan de mi ayuda.

Me comprometo a terminar con los apodos que están basados en memorias, en ideas y creencias y juicios hacia las personas – no honrándolas como la vida aquí.

Me comprometo a recordarme a mí mismo cual es mi punto de partida para comunicarme – honestidad como uno mismo y sentido común.

Me comprometo a revisar minuciosamente con el perdón a uno mismo esos momentos en los que ‘me pierdo’ o ‘no sé quien soy’ o un montón de problemas que genero dentro de mí mismo al percibir y creer que ‘caí’ o ‘fallé’.